De las cerca de 6.000 mujeres que están registradas en la base de datos de la Fundación ONCE como demandantes de empleo, en su programa Inserta Empleo en Canarias, 200 han manifestado sufrir violencia de género. Así lo indicaron durante la reunión mantenida ayer por la directora del Instituto Canario de Igualdad (ICI), Kika Fumero, con Teresa Palahí, secretaria general de la Fundación ONCE; Miguel Ángel Déniz Méndez, presidente de la Fundación ONCE en Canarias; Luis Cayo Pérez Bueno, presidente del Cermi, y Carmen Lauzirika, presidenta en Canarias de esta entidad.

En el encuentro, el Instituto Canario de Igualdad se ha comprometido con dos entidades de referencia en atención a la discapacidad como son la ONCE y el Cermi (Comité Español de Representantes de Personas con Discapacidad) a colaborar e impulsar medidas y políticas que permitan visibilizar y dar mayor protección a las mujeres con discapacidad que residen en las Islas; y se acordó sobre la importancia de establecer medidas concretas para los casos de violencia de género de mujeres con discapacidad.

Políticas específicas

Las tres entidades coincidieron en la necesidad de impulsar políticas de igualdad específicas para este colectivo, dadoque el 60% de las personas con discapacidad en Canarias son mujeres.

"Hemos puesto sobre la mesa la voluntad e intención de colaborar conjuntamente y hemos abierto la puerta a varias líneas de actuación. Trabajaremos con la ONCE y Cermi para visibilizar a las mujeres, medir y desarrollar acciones y políticas públicas que ayuden a mejorar la vida de estas mujeres", aseguró la directora del Instituto Canario de la Mujer, Kika Fumero.

La directora mostró su preocupación expresa sobre las mujeres con discapacidad que además sufren o han sufrido violencia de género. "Estas mujeres padecen, además, el agravante de que no se sienten creídas ni escuchadas pues su voz al sufrir una discapacidad no se legitima y, por lo tanto, suelen callar más y vivir aún más en silencio que la media esta situación".

A través del programa Inserta, la Fundación ONCE, identifica socios estratégicos para el desarrollo de acciones que posibiliten la inserción laboral directa de personas con discapacidad en el seno de empresas de reconocido prestigio y pertenecientes a los más diversos sectores económicos, así como la activación en dichas empresas de una serie de medidas y acciones que de manera directa o indirecta contribuyan a la mejora de las condiciones de vida de personas con discapacidad como elemento integrador y de valor añadido en el ámbito de la Responsabilidad Social Corporativa.