La gran mayoría de hospitales comarcales tiene problemas para contratar especialistas

Los médicos se concentran en las zonas urbanas y, dentro de éstas, en las de mayor nivel socioeconómico. No sólo sucede en España. También en otros países de Europa. En nuestro país, los servicios de salud están detectando dificultades para la contratación de facultativos en algunas zonas, lo que se llama áreas de difícil cobertura. Sobre todo, en entornos rurales, donde los hospitales comarcales tienen serios problemas para retener a especialistas. Es una de las conclusiones de un informe del Consejo General de Colegios Oficiales de Médicos (CGCOM) sobre los llamados desiertos médicos. Entre los datos: el 91% de los representantes de médicos jóvenes considera que esos desiertos son un problema en su provincia.

Así se ha expuesto este viernes en la presentación del documento 'Áreas de difícil cobertura en España. Desiertos médicos', elaborado por la sección nacional de médicos jóvenes del CGCOM. Y que determina que, por ejemplo, un 44,4% de esos facultativos jóvenes cree que los residentes "están siendo utilizados injustificadamente para paliar la situación" de desertificación que se vive en distintas zonas.

Existen más problemas en aquellas comunidades con mayor dispersión geográfica como Castilla y León, Castilla-La Mancha, Aragón o Andalucía

¿Dónde existen más problemas para cubrir esas plazas?. En donde existe una mayor dispersión geográfica, como Castilla y León, Castilla-La Mancha, Aragón o Andalucía donde la "gran mayoría" de los hospitales comarcales tienen problemas para encontrar especialistas. Inmunología, Medicina del Trabajo, Psiquiatría y Medicina de Familia y Comunitaria, son las especialidades con mayor déficit que se ven afectadas.

¿Qué es un desierto médico?

Un desierto médico, se detalla en el documento, es el resultado final de un proceso complejo que implica "una incapacidad continua y creciente" de una población determinada para acceder a los servicios de salud de manera oportuna y "contextualmente relevante". Su traducción en el contexto de España podría asemejarse a las plazas de difícil cobertura, "pero el escenario y los matices del concepto de desierto médico son más amplios y complejos", se advirtió en rueda de prensa.

En España esa desertificación es un problema emergente que "requiere la atención de todos los agentes implicados", y que, a pesar de haberse propuesto medidas y acuerdos, "es necesario un análisis más profundo y la implementación de estrategias adecuadas para garantizar el acceso a servicios de salud en zonas rurales", señalaron los representantes del órgano colegial.

"Nuestro objetivo debe ser conseguir el máximo de equidad, pero eso no significa que podamos tener todos un centro sanitario en nuestra puerta. Lo que debemos conseguir es una accesibilidad lo más inmediata posible a un consultorio, centro de salud u hospital donde se nos ofrezca la máxima garantía de seguridad clínica", ha señalado la vicepresidenta del CGCOM, María Isabel Moya.

Un "momento crucial"

El doctor Domingo A. Sánchez, representante Nacional de Médicos Jóvenes y coordinador de este estudio, habló de un "momento crucial" y reseñó que uno de los pilares básicos del sistema sanitario es la accesibilidad a ese mismo sistema. Y advirtió que este proceso de desertificación médica no es exclusivo de nuestro país; se trata de una problemática emergente a nivel europeo debido a cambios en el ciclo demográfico médico y de la población general.

A lo largo del análisis se proponen medidas dirigidas a tres etapas: universitaria y grado, formación sanitaria especializada y primeros años como especialista, y a lo largo de la trayectoria profesional. Destacan propuestas como incentivos económicos, mejoras de las condiciones laborales, flexibilidad en la organización del trabajo, inversión en zonas rurales y oferta de formación continuada.

El informe desaconseja medidas como contratar médicos sin especialidad para cubrir dichas áreas

Por otra parte, se desaconsejan medidas como dificultar la oferta y publicación de plazas en áreas sin dificultad, ofrecer contratos divididos temporalmente entre plazas sin dificultad y las de difícil cobertura, ofrecer plazas genéricas en un área de salud donde la jefatura o dirección puedan decidir el destino final, contratar médicos sin especialidad para cubrir dichas áreas y obligar a médicos especialistas recién formados a quedarse en su unidad docente en áreas de difícil cobertura. Estas políticas pueden generar "precariedad, inequidad y afectar negativamente la calidad asistencial y la atención sanitaria de la población", se zanja.