Estudio científico

¿Debería la carne incluir 'advertencias' como el tabaco? Esta es la propuesta de unos científicos

El 10% de las personas que participaron en un estudio en el que se les advertía de los efectos en la salud o el medio ambiente de algunos alimentos cambiaron las comidas basadas en carne por alternativas vegetales

Una hamburguesa con una etiqueta en la que se advierte sobre el impacto de la carne en el medio ambiente.

Una hamburguesa con una etiqueta en la que se advierte sobre el impacto de la carne en el medio ambiente. / UNIVERSIDAD DE DURHAM

Valentina Raffio

Hace más de diez años que en los paquetes de tabaco se incluyen etiquetas para advertir de los riesgos asociados al consumo de estas sustancias. Estos mensajes, en los que se hace hincapié en los daños que provocan estos productos tanto en los consumidores como en las personas de su alrededor, han conseguido crear más consciencia sobre el impacto nocivo del humo y, a su vez, desincentivar su uso. ¿Y si esta misma técnica se aplicara al consumo de carne, un alimento que también se asocia con daños para la salud y el medio ambiente? Un equipo de investigadores de la Universidad de Durham lo ha puesto a prueba y, según explican, han logrado rebajar al menos un 10% el consumo de carne en un grupo de voluntarios.

El experimento se ha desarrollado de la siguiente manera. Un equipo de expertos del departamento de psicología de la Universidad de Durham invitó a un total de 1.001 adultos carnívoros a participar en una especie de juego. Los voluntarios, divididos en cuatro grupos, tuvieron que analizar el menú de un restaurante y escoger qué platos preferían consumir. Algunos alimentos se presentaron sin ningún tipo de etiquetado. Otros, en cambio, incluyeron etiquetas informativas en las que se decía, por ejemplo, que el consumo excesivo de carne puede provocar daños en la salud, aumentar las emisiones de gases de efecto invernadero o contribuir a los procesos de deforestación que pueden conducir al surgimiento de nuevas pandemias.

"Agregar etiquetas de advertencia a los productos cárnicos podría ser una forma de reducir el consumo de carne"

Milica Vasiljevic

— Investigadora

¿El resultado? Según explican los responsables de este trabajo, liderados por Milica Vasiljevic y Jack Hughes, en el 10% de los casos los usuarios cambiaron las comidas basadas en carne por alternativas vegetales. "Ya sabemos que comer mucha carne, especialmente en el caso de la carne roja y los productos ultraprocesados, es malo para la salud y contribuye al cambio climático. Agregar etiquetas de advertencia a los productos cárnicos podría ser una forma de reducir, o al menos concienciar, sobre los riesgos para la salud y el medio ambiente derivados del consumo de carne", comenta Vasiljevic en un estudio donde se analizan los resultados de este curioso experimento.

Reducir el consumo de carne

Hace tiempo que la comunidad científica reclama reducir el consumo de carne para salvaguardar la salud de las personas y del planeta. Según advirtió el Panel Intergubernamental sobre Cambio Climático (IPCC) de Naciones Unidas en su informe especial sobre 'dieta sostenible', la pirámide alimentaria debería incluir más cereales y vegetales y mucha menos carne respecto a lo que se consume actualmente. En este sentido, los expertos argumentaron que la opción más beneficiosa para las personas y el planeta consistía en consumir menos de 50 gramos diarios de huevos, pescados y carne. O el equivalente a comer pescado dos veces por semana y carne roja una vez al mes.

Naciones Unidas afirma que deberíamos consumir menos de 50 gramos diarios de huevos, pescados y carne

Ya son varias las iniciativas que se han puesto en marcha para desincentivar el consumo de carne. En Estados Unidos, por ejemplo, surgió el movimiento 'Lunes sin carne' ('Meatless monday') que propone eliminar estos productos de los menús de instituciones públicas y privadas durante al menos un día a la semana. En ciudades como Ghent, en Bélgica, también se han decidido ofrecer sólo opciones vegetarianas todos los jueves. En Dinamarca se introdujo un impuesto a la carne con altos contenidos de grasa saturada para intentar así reducir su consumo. Y en Reino Unido se está estudiando prohibir los anuncios de este tipo de productos a partir de las nueve de la noche.