Da una paliza a su padre y acaban los dos detenidos por plantar marihuana

Una actuación por una violencia doméstica en el interior de un domicilio de Zaragoza acabó con la detención del agresor, pero también de la víctima y no por la pelea sino porque los agentes hallaron seis plantas de marihuana.

La intervención tuvo lugar este viernes en el interior de un piso de la calle Gil Morlanes, en el zaragozano barrio de San José. Eran sobre las 09.00 horas cuando los vecinos comenzaron a escuchar gritos y golpes, no dudando en llamar a la sala del 091 que envió varias patrullas de la Brigada de Seguridad Ciudadana de la Jefatura Superior de Policía de Aragón al lugar.

Ya en el piso, los agentes se encontraron a un hombre, identificado como B. L. G., de origen español y de 48 años, y a su hijo, J. L. R., de 22 años. Al parecer, el hijo habría agredido a su padre, quien habría recibido varios puñetazos e, incluso, le habría arrojado una sartén a la cabeza. Como consecuencia de ello, el progenitor resultó herido, siendo trasladado al hospital provincial Nuestra Señora de Gracia de Zaragoza antes de ser trasladado a los calabozos del Cuerpo Nacional de Policía en el Actur donde se reencontró con su hijo. Pues este hombre fue arrestado por un delito contra la salud pública al igual que su vástago.

Todo después de que los agentes, además de encontrarse una casa desordenada, hallaron seis plantas de marihuana. Ahora la Policía deberá de investigar a quién le pertenecen para mantener la imputación a los dos o solo a uno de ellos.

Envoltorios de golosinas

Por otro lado, la Guardia Civil en el marco de la operación Kaugumi, ha desmantelado una organización criminal dedicada a la infraestructura, producción, distribución de marihuana en envoltorios de golosinas. Estos se vendían e tiendas de nutrición deportiva, Growshop, expendedurías de tabaco e incluso estaciones de servicio, como productos de uso ornamental. Fruto de la operación han sido detenidas nueve personas e investigadas 147 más. Las actuaciones se han llevado a cabo en varias provincias españolas, entre ellas en Aragón y Huesca.

Los productos se envasaban simulando una apariencia legal dentro de la cadena de productos de alimentación con envoltorios muy atractivos, algunos de ellos con apariencia de golosinas.

En la operación se ha intervenido cerca de dos toneladas de cogollos de marihuana, más de 100 plantas de marihuana, 12 kg de picadura de hachís, más de cinco kg de resina de hachís, a la vez que bienes procedentes de la comisión de estos delitos, entre ellos dos vehículos, cerca de 20.000 euros en efectivo y otros 51.000 euros inmovilizados en una cuenta bancaria a disposición judicial y diverso material informático.

La operación se inició a raíz de varias investigaciones llevadas a cabo por la Guardia Civil en Almería tras tener conocimiento de que en diferentes establecimientos de la provincia se estaban comercializando productos psicotrópicos derivados del cannabis con apariencia legal.

Fruto de estas investigaciones, los agentes localizaron una empresa en la provincia de Granada, la cual contaba con una estructura perfectamente organizada para llevar a cabo la producción, elaboración, distribución y venta de estos productos, obteniendo un alto nivel de beneficios económicos.