Muere el conductor de una ambulancia mientras llevaba a un paciente al hospital

En Palma, Mallorca, un trágico suceso ha conmovido a la comunidad médica local. Un técnico del SAMU 061, de 48 años de edad y con una larga trayectoria en el servicio desde 1995, perdió la vida mientras realizaba el traslado secundario, no urgente, de un paciente. La noticia de su fallecimiento se dio a conocer a través de la red social X (anteriormente conocida como Twitter), por medio de la cuenta oficial del servicio público de ambulancias de las Islas Baleares, @SAMU061IB.

La víctima sufrió una parada cardiorrespiratoria en medio del traslado de un paciente desde Manacor hasta Palma. A pesar de haber empezado a sentirse mal cerca de la rotonda de Vilafranca, mantuvo la calma y logró estacionar la ambulancia, evitando así un posible accidente que podría haber afectado a otros vehículos y transeúntes.

Sus colegas, al percatarse de la situación, le brindaron atención inmediata mediante maniobras de reanimación cardiopulmonar. Posteriormente, fue trasladado al Hospital Universitario de Son Espases, aunque, lamentablemente, no fue posible salvar su vida, y falleció como resultado de la parada cardiorrespiratoria.

El SAMU 061 y la Conselleria de Salud del Govern balear expresaron sus más sinceras condolencias ante esta trágica pérdida. Desde el SAMU, se publicó un mensaje en el que lamentaban profundamente la muerte de su colega y extendían sus condolencias a la familia, amigos y compañeros. La Conselleria de Salud también compartió su pésame y apoyo a la familia, amigos y colegas del técnico del SAMU 061, recordándolo como un destacado profesional y deseándole paz en su descanso.

La parada cardiorrespiratoria (PCR) representa una emergencia médica crítica en la que se interrumpe repentinamente la función del corazón y la respiración. Esto impide que el oxígeno llegue a los tejidos del cuerpo, lo que puede provocar daños severos en los órganos. Esta situación suele deberse a una alteración eléctrica en el corazón y, si no se aborda de manera inmediata, puede resultar en la muerte del individuo. No obstante, es potencialmente reversible si se actúa con rapidez y se administra reanimación cardiopulmonar (RCP) adecuada hasta que se pueda utilizar un desfibrilador para restaurar el ritmo cardíaco normal. La RCP básica implica mantener el flujo de oxígeno y la circulación sanguínea en el cuerpo de la persona afectada hasta que llegue ayuda médica profesional.

En caso de presenciar una parada cardiorrespiratoria, es fundamental llamar a los servicios de emergencia y realizar maniobras de RCP hasta que llegue ayuda especializada. La víctima estará inconsciente y carecerá de pulso y respiración, por lo que es esencial colocarla en un lugar seguro y llevar a cabo medidas de estimulación para intentar recuperar la consciencia.