Un hombre admite que tocó las partes íntimas de un menor en el polideportivo Las Rehoyas

El encausado evita la entrada en prisión, pues la defensa alega que ha reparado el daño al indemnizar 15.000 euros a la víctima, de 13 años

Fernando A. F., autor confeso de los hechos, en el juicio ante la Sección Sexta de la Audiencia Provincial de Las Palmas.

Fernando A. F., autor confeso de los hechos, en el juicio ante la Sección Sexta de la Audiencia Provincial de Las Palmas. / B. M.

Benyara Machinea

Benyara Machinea

El hombre que abusó sexualmente de un joven de 13 años en el vestuario del polideportivo Las Rehoyas evita la entrada en la cárcel tras admitir los hechos. En el juicio celebrado este martes ante la Sección Sexta de la Audiencia Provincial de Las Palmas, las partes han llegado a un acuerdo, por el que la fiscal acepta una rebaja de la petición de pena a dos años y dos meses de prisión. Como el encausado carece de antecedentes penales, la defensa ya ha solicitado que se cancele su entrada en el centro penitenciario, pues cumple con los requisitos legales para solicitar esta medida.

La defensa del autor de los hechos ha alegado una reparación del daño para rebajar la solicitud de pena, pues el encausado pagó 15.000 euros de indemnización a la víctima en enero de este año y ha mantenido el alejamiento del menor desde que se produjo el abuso, así como de los lugares que frecuenta y del propio centro deportivo. El Ministerio Fiscal reclamaba inicialmente siete años de prisión: seis por un delito de abuso sexual y uno por un delito de exhibicionismo.

Los hechos tuvieron lugar el 2 de mayo de 2019, sobre las 18.30 horas. El acusado, Fernando A. F., se encontraba en ese momento en el vestuario de la piscina del centro deportivo de Las Palmas de Gran Canaria y, "con ánimo de satisfacer su apetencia sexual se acercó al menor, que en ese momento contaba con 13 años de edad, y le tocó el pene", describe el escrito de acusación de la fiscal.

Tocamientos y exhibicionismo

El menor se negó a este contacto y "repelió con sus brazos al acusado", según explica el escrito. Ante esta reacción, el denunciado se sentó en un banco y empezó a masturbarse frente a la víctima. Por último, antes de marcharse, volvió a acercarse al menor y le tocó las nalgas.

La petición de pena mantiene los ocho años de libertad vigilada, la inhabilitación especial para cualquier profesión u oficio que conlleve un contacto regular y directo con menores de edad y la inhabilitación para el ejercicio del derecho al sufragio pasivo. Además, deberá mantener una orden de distanciamiento al menor, a los lugares que frecuenta y al centro deportivo Las Rehoyas durante seis años, de los que se descuentan los dos que ya ha cumplido.

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