Tribunales

Aplazado el juicio al médico de Canalejas acusado de abusos por motivos de salud

El acusado se enfrenta a 62 años de cárcel por presuntos tocamientos de índole sexual hacia 26 mujeres que requerían atención sanitaria

Centro de salud de Canalejas, donde ejercía el acusado como médico de familia.

Centro de salud de Canalejas, donde ejercía el acusado como médico de familia. / Andrés Cruz

Benyara Machinea

Benyara Machinea

La Sección Sexta de la Audiencia de Las Palmas ha suspendido el juicio previsto para el próximo martes, nueve de abril, contra Carlos L. R., el médico acusado de abusar sexualmente de 26 mujeres en el Centro de Salud de Canalejas. La vista oral se ha aplazado sin una nueva fecha por una "causa de salud del acusado", según informó este viernes el Tribunal Superior de Justicia de Canarias. La Fiscalía reclama una condena de 62 años de cárcel, con una indemnización de 75.000 euros, para paliar los daños morales de las perjudicadas.

Los supuestos tocamientos hacia las pacientes del centro de salud habrían tenido lugar durante casi una década, entre los años 2010 y 2019. El acusado ejercía en aquella época como médico de cabecera dependiente del Servicio Canario de Salud, pero fue apartado de su cargo hace cinco años por las denuncias en su contra. En agosto de 2019 fue condenado por la Sección Sexta de la Audiencia Provincial a cumplir una condena de 18 meses de prisión por abusar sexualmente de otra paciente.

La Consejería de Sanidad del Gobierno de Canarias y la Fiscalía de Las Palmas también impulsaron denuncias en los años 2005, 2010, 2014 y 2017 a raíz de las quejas de las pacientes contra el sanitario, pero no prosperaron en los juzgados.

Un centenar de mujeres pidieron cambiar de doctor

La Policía llegó a localizar a un centenar de mujeres que habían solicitado el cambio de Carlos L. R. como médico de cabecera, de las que una veintena denunciaron tocamientos de índole sexual en la consulta pública del doctor. Las perjudicadas apuntaron a un mismo modus operandi, que supuestamente consistía en acercarse a las mujeres simulando que les iba a hacer un masaje o que les iba a examinar para después tocarles los pechos o frotar sus genitales contra sus cuerpos.

"Varias perjudicadas formularon reclamaciones por estos hechos en el centro de salud y lo pusieron de manifiesto a profesionales de dicho centro", asegura la Fiscalía en su escrito de acusación.