San Francisco es uno de los barrios históricos más visitados de Canarias, y es curioso imaginar lo qué hubiera ocurrido si los planes de Néstor Martín Fernández de La Torre se hubieran llevado a cabo. El pintor tenía previsto, en los años 30, la creación de un pueblo canario habitado por artesanos y artistas que ejercieran sus labores en sus calles. El plan fracasó, pero sigue siendo recordado por los que saben de su existencia. Así, ayer se celebró en el barrio el recorrido número 37 en recuerdo de esta iniciativa que jamás llegó a ejecutarse. Además, sus vecinos despidieron con este acontecimiento sus fiestas patronales que han llenado cada rincón de ilusión.
Fue en 1980 cuando se hizo la primera ruta de este tipo en San Francisco, donde más de 50 personas han sido ponentes a lo largo de los años, hablando sobre diferentes materias. Etnografía, folclore, historia, música o economía entre otros temas de relevancia para conocer el espacio teldense. Conforme ha pasado el tiempo el número de participantes ha aumentado y las ganas por seguir también. Ayer se demostró el interés cultural existente y los asistentes fueron observadores y oyentes de un relato inolvidable.
A las ocho de la tarde ya estaban reunidos en la plaza principal, tanto el público como los encargados de guiar y las autoridades locales que dieron la bienvenida. Iniciando un viaje por las calles Trescasas, Carreñas y Porterías, hasta concluirlo en la plaza de Los Romeros, los participantes disfrutaron de los secretos escondidos en cada rincón.
De esta forma, cada 60 metros tomaba la palabra cada uno de los encargados de dar voz a la historia del barrio. Así, entre uno y otro, la Banda Municipal de Música interpretó varios temas que dieron ambiente a una ruta sublime. Antonio González, cronista oficial de Telde, fue el conductor del sendero e hizo un repaso desde el nacimiento de la zona hasta su evolución urbanística y humana. "Han habido cambios, como los últimos edificios que desvirtúan la estampa tradicional del barrio o los adoquines de baja calidad que se han colocado", comenta. Entre otras críticas, como "la falta de reparación de la fuente de la plaza que lleva desde 1858 esperando", recordó que hay que "valorar, enamorarse y defender San Francisco, pero es necesaria una autocrítica de lo que debe tener por lo que es".
Por otro lado, Daniel Montesdeoca, directo del Museo de Néstor, dio a conocer los detalles del proyecto del pintor, "queriendo que las instituciones compraran las casas del barrio para dárselas a artesanos y artistas para que produjeran ahí, o su plan de hacer de la iglesia un taller para sus creaciones y un espacio de exposición para lo producido". Además, el técnico de la Fedac, Francisco Modesto, intervino para explicar los oficios artesanales que se perdieron y los que siguen.
Asimismo, menciones a los artesanos del naife canario, de timples, guitarras o bandurrias, de bordados y calados, y a Milia Bañares, vecina del barrio que destaca por ser una de las mejores tejedoras del Archipiélago. Sin duda, rincones capaces de regalar aprendizajes incluso de puertas para adentro. Un recorrido que finalizó con la mención especial a Rhoner Bañares, del barrio, por su importante carrera como diseñadora de joyas y su medalla nacional. "Porque aquí hay mucho valor", añade González con orgullo. El mismo que ayer creció entre los asistentes a la ruta por el patrimonio que se posee en el municipio.
