La UD Las Palmas continuó ayer con la exigente semana de entrenamientos físicos que está llevando a cabo aprovechando el parón de selecciones. La sesión matinal de ayer, según informa el club, consistió en un test de confirmación de velocidades de carrera. José Viela y Rafa Cristóbal, preparadores físicos del equipo, dirigieron un trabajo específico con la plantilla que consistió en un test de velocidades de carrera, con tomas de lactato y frecuencia cardiaca en una sesión celebrada a puerta cerrada en el Gran Canaria. El entrenamiento estuvo supervisado por los servicios médicos del club.
Pako Ayestarán y su cuerpo técnico están exigiendo a los jugadores durante esta semana de trabajo con la idea de situar a los jugadores en su mejor tono físico. Y es que en el club consideran que ese es uno de los motivos por los que el equipo no está rindiendo. Este sábado el conjunto amarillo concluye la semana con una sesión matinal, también a puerta cerrada. Y comienza la próxima semana con un entrenamiento el lunes, a las 16.30 horas, en El Hornillo, a donde volverá el equipo tras varias semanas en el Gran Canaria.
