Ocho años después, un clásico canario sin Suso Santana. El Gran Canaria pierde a la diana gigante de sus críticas. El dilema late en la grada del partenón del Roque Nublo, ¿ahora, a quién pitamos?. Llega el 'Tete' más rocoso, indomable con el registro de visitante tras conquistar tres victorias lejos del Heliodoro de altura -ante el Fuenlabrada, Valladolid y Huesca-. El cuadro de Ramis late cuarto en la tabla y dispone de la mejor versión de Shashoua con cuatro tantos como máximo realizador.

El resto, una legión de mercenarios del sacrificio, equipo móvil y difícil de frenar con Elady y Enric Gallego -lesionado- como argumentos en la primera línea de ataque. En la medular, Aitor Sanz, Míchel, Corredera, Rubén Díez y Bermejo. Velocidad, presión y un cuchillo entre los dientes. A la fortaleza de Carlos Ruiz, León y Sipcic de centrales, se suma el trabajo de Álex Muñoz -sin obviar a Pomares- en el lateral zurdo. Por la derecha, ante la baja de Mellot por sanción, la opción del canterano David es la más lógica. Una gran oportunidad para las penetraciones de Pejiño. Ramis no desechó esperar por Shaquell Moore, que está con su selección de Estados Unidos y llega entre el viernes y el sábado en el vuelo chárter de LaLiga. Se espera una entrada récord en este curso.

Es un Tenerife diferente y bien armado, en relación al ogro del Teide del 'Ortolazo'. Relegado a la suplencia Dani Hernández, el portero Soriano, ex del Málaga, se ha hecho con la titularidad de forma indiscutible. Solo dos derrotas ante CD Mirandés en el Heliodoro y en Almería. Cuarto clasificado y sin Suso. Aitor Sanz y Carlos Ruiz lideran la nómina de derbis en el plantel chicharrero. No ganan en el Gran Canaria desde 2008 con el tanto de Alfaro. Viera contra el ejército de Sanz. En Siete Palmas, con el '21', la UD no sucumbe en los clásicos: victorias y descenso blanquiazul (2011) así como tablas en 2015. En el jardín del Mesías de La Feria se admiten todas las fantasías. Las iras del público amarillo, ante la ausencia de Suso Santana -once derbis canarios y tres victorias- apuntan a Sanz y Ruiz. Dos viejos rockeros del infierno del Teide.