Armando Sadiku vuelve el domingo (20.00 horas) a Gran Canaria. En la UD no tuvo protagonismo hasta el tramo final del curso pasado y fue clave, con cuatro tantos, en la escalada del equipo hacia el ‘playoff’. Ahora, en el Cartagena, suma cinco goles en 11 jornadas y es la amenaza principal del ‘Efesé’.

Un viejo conocido llega el domingo (20.00 horas) al Estadio de Gran Canaria. Es Armando Sadiku, delantero que la temporada pasada no cuajó como se esperaba en la UD y que el presente curso ha encontrado su sitio en el FC Cartagena. Suma ya cinco goles en 11 partidos, uno más de los que logró en toda una campaña como amarillo, y uno menos de los que suman los tres atacantes de Las Palmas en la actualidad, y el fin de semana se presenta como la principal amenaza para la defensa del liderato del cuadro de García Pimienta.

El último de su tantos lo consiguió anteayer en la victoria de su equipo sobre el Ibiza, al que la UD no logró vencer en su último compromiso en casa. Fue el de la sentencia, el 2-0 con el que el Efesé saltará al césped de Siete Palmas con sólo tres puntos menos que su rival, a tiro de un triunfo para igualarle. Muy a su estilo, birló a su defensor en el área chica para quedarse solo y aprovechar un centro perfecto desde la izquierda para cabecear en plancha. Imparable.

Así logró alguna de las cuatro dianas que hizo con Las Palmas, que con cuyo fichaje en el verano de 2021 pretendía contar en la plantilla con un perfil de delantero distinto a Jesé y Rafa Mujica, los otros dos que competían por el puesto de nueve. Sin embargo, el albanés estuvo inutilizado durante casi toda la temporada y sólo en el tramo final el barcelonés le dejó reivindicarse.

Antes, con Pepe Mel en el banquillo, apenas tuvo protagonismo. Fue titular en la primera jornada y luego no lo fue hasta la primer partido entre semana, en Lugo, ya en octubre. Nunca más volvió a serlo en Liga con el madrileño al mando. En Copa del Rey, en cambio, sí lo fue, tanto en Vélez como en Valladolid y marcó en ambos compromisos, pero tampoco le sirvió; el técnico anterior estaba enamorado de Jesé.

El albanés, olvidado por Mel y por Pimienta en un principio, fue clave en el ascenso del equipo hacia el ‘playoff’

Meses después de su última titularidad liguera García Pimienta le incluyó en el once el día de su debut frente a la Real Sociedad B en el Gran Canaria, pero no marcó y otra vez fue relegado al ostracismo. Se pasó cuatro partidos sin jugar y dos como suplente hasta que el 21 de marzo, en el José Zorrilla, cambió todo

No sólo para él, sino también para el equipo. Sadiku marcó el gol de la victoria (0-1) en el campo de un candidato al ascenso cuando la UD venía de perder contra el Girona y nadie, ni siquiera los directivos, que deslizaban que pensaban ya en la temporada siguiente sin el catalán al mando, creía en que podría alcanzar lo que finalmente consiguió: clasificarse para el playoff.

Aquel fue el primero de cuatro triunfos consecutivos y 11 encuentros sin perder que metieron a la UD en la promoción, y también el primero de cuatro tantos del albanés –hizo dos al Leganés y uno al Eibar–, titular en todos los partidos del tramo final salvo frente al Málaga, por sanción, y el Sporting, por descanso días antes de jugar la eliminatoria contra el Tenerife. Finalmente no pudo participar en los duelos clave por un percance muscular; el equipo notó su baja.

Fichado por un curso con el aval de Luis Helguera, el club no le ofreció seguir y recaló en el Cartagena, con el que llega con cinco goles en la cartera. Es la reivindicación de Armando.