Un muro de hormigón llega mañana (17.30 horas) al Estadio de Gran Canaria. Se trata del Burgos CF, tercer clasificado con sólo dos puntos menos que la UD Las Palmas y el equipo menos goleado después de 13 jornadas. La digestión de la primera derrota de la temporada, el sábado pasado en Huesca (1-0) ha tenido que ser forzosamente rápida por la premura del calendario. Olvidada la caída que no dolió porque los amarillos se habían ganado el derecho a poder perder un partido que, además, en su última media hora terminaron en el área del rival, le toca presentar, ante un oponente que usará la misma estrategia que el anterior, una nueva fórmula para derribar murallas.
Pese a tener el balón y disparar más, Las Palmas no suele traducir su dominio en ocasiones claras
Es uno de los pequeños retos del cuadro de Xavi García Pimienta, el encargado de encontrar las soluciones a un equipo hecho a imagen y semejanza de él. Y de Jonathan Viera. Si bien el conjunto isleño demostró en el tramo inicial del curso haber asimilado nuevos registros como el de dar un paso atrás, ceder algo de posesión al rival para obligarle a salir y luego tratar de aprovechar los posibles espacios, en determinados partidos ha caído en la trampa de tocar y tocar sin crear las ocasiones que habría de esperar de tanta superioridad con la pelota.
El último ejemplo fue el choque de Huesca, que se adelantó en el minuto 14 con un tanto de Carillo e instaló una barrera en la frontal de su área que la UD sólo fue capaz de superar, a medias, en la última media hora, cuando entró Pejiño. El barbateño disfrutó de las dos oportunidades más claras. La primera no acabó en gol porque Rubén Pulido desvió el esférico casi sin querer; la segunda quedó en nada porque telegrafió su tiro a las manos de Andrés Fernández, apenas exigido. Vitolo gozó de otra, pero disparó al aire. Y nada más.
Con un 86% de posesión y 17 disparos, el peligro real de Las Palmas fue mínimo, tal y como sucediera en el partido frente al Ibiza en el Gran Canaria en un duelo que concluyó en empate (0-0). Lo mismo pasó dos semanas después contra el Cartagena, que jugó con uno menos durante toda la segunda parte y no se llevó un punto porque Viera logró el tanto de la victoria en el minuto 92 (1-0). Y también con uno más en todo el segundo acto la UD fue incapaz de llevarse el triunfo de Santander ante el Racing (0-0).
Así, la misión de García Pimienta es encontrar nuevas vías para perforar los muros que se va a encontrar en la mayoría de los partidos, el primero de ellos, el de mañana. Su suma, además, el hecho de que la UD fue incapaz de marcar un gol al Burgos el curso pasada, aunque los contextos eras distintos. En la ida, en El Plantío, el técnico era todavía Pepe Mel; en la vuelta, en Siete Palmas, el barcelonés, que llevaba sólo dos partidos al mando, sufrió su primera derrota (0-2).
Otros tiempos
Todavía no había conseguido crear el engranaje adecuado que tampoco lograría hasta más de un mes después, cuando el equipo se quitó toda la presión de encima tras perder frente al Girona. Aunque Las Palmas no era el equipo de hoy, el conjunto burgalés asaltó el Gran Canaria (0-2) con un cabezazo a la salida de un córner y un contraataque el día en que Viera falló un penalti que pudo haber metido a la UD en el partido. Aún así, los isleños cayeron en la trampa de Julián Calero.
Pasados ocho meses, Las Palmas es un nuevo equipo, engranado, con nuevos jugadores y líder, y que presentará rotaciones por tratarse del segundo choque de la serie de tres en ocho días. Así lo anunció García Pimienta en la previa del duelo de El Alcoraz y concuerda con lo que ya hiciera en la jornada intersemanal anterior, en Lugo, cambió a la mitad del equipo que había jugado cuatro días antes en la Isla.
El técnico piensa en introducir un equipo casi totalmente distinto al que salió en El Alcoraz
La modificación del lateral derecho es obligada por la sanción de Álex Suárez, que vio la quinta amarilla el sábado pasado. Así, Lemos será el lateral derecho y estará acompañado presumiblemente por Coco, Sidnei y Enrique Clemente en la defensa.
Fabio, titular en Huesca, podría dar descanso a Mfulu y Loiodice ocupar uno de los dos interiores. La gran duda es saber si Jonathan Viera esperará su oportunidad en la segunda parte, lo que significaría que Moleiro jugaría por el centro. En la delantera, Pejiño y Benito son los candidatos principales a ocupar los extremos, mientras que Sandro ocupará la posición de nueve en busca del gol.
Más allá de los nombres, la verdadera misión de García Pimienta será encontrar soluciones a la muralla que el Burgos pondrá delante de su portería. Lo previsible es que el cuadro peninsular llegue poco al área de la UD, que los amarillos tengan más el balón, que tiren más y que pase lo que pase al final el técnico considere que lo justo habría sido un triunfo de su equipo. La incógnita es si logrará superar la resistencia.
Sólo una derrota foránea
El Burgos CF de Julián Calero es la gran revelación de la temporada en Segunda División, cuestión que se demuestra con la tercera plaza que ocupa después de 13 jornadas. Mañana (17.30 horas) llega a la Estadio de Gran Canaria en el que será su séptimo partido lejos de El Plantío en el presente curso Sus números fuera de casa son más positivos que negativos porque ha conseguido una victoria, en Andorra (0-1), y cuatro empates, en Albacete (0-0), Gijón (0-0), Leganés (0-0) y Villarreal (0-0). La única derrota que sufrió fue en su última salida, en Lugo (2-0), donde recibió sus primeros goles foráneos después de cuatro encuentros con la portería a cero. Cabe destacar que los dos tantos del conjunto gallego tuvieron lugar con Dani Barrio en la portería por la sanción de Churripi, que será titular en Siete Palmas. | P. F.
