El producto casero ideal para dejar el colchón como nuevo y libre de ácaros

Limpar nuestra cama es algo esencial para cuidar nuestro estado de salud

Dormir es esencial para un buen estado de salud y tener la suficiente energía. Los expertos recomiendan que una persona adulta debería dormir entre 7 o 8 horas diarias, los beneficios de dormir bien repercuten directamente en la salud. Los problemas asociados a la falta de sueño son muy frecuentes en la población mundial y hay que tener en cuenta muchos factores. 

Según la Sociedad Española de Neurología (SEN) entre un 20% y un 48% de la población española presenta problemas a la hora de ir a dormir o para mantener un sueño profundo durante toda la noche. Para medir la calidad del sueño se tienen en cuenta tres factores: el tiempo total que estamos descansando, el sueño profundo y la frecuencia con la que se interrumpen los ciclos de sueño.

Los especialistas lo tienen claro: seguir una rutina de sueño es muy importante para poder descansar bien. Irse a dormir siempre a la misma hora, no utilizar dispositivos electrónicos dos horas antes de irse a dormir o utilizar la habitación solo para dormir son algunos de los principales consejos. Pero además, hay que tener en cuenta otro factor de gran importancia: el estado del colchón.

El producto casero para limpiar el colchón

El colchón es muy importante a la hora de conciliar el sueño. Una cama en mal estado o en la que no se cuida la higiene repercute directamente en el estado de salud. El polvo, los ácaros y la suciedad pueden acumularse en el colchón en el que vamos a pasar casi un tercio de nuestro día. Por eso, hay que seguir una rutina de limpieza.

En el supermercado podemos encontrar muchos productos que combaten la suciedad del colchón, pero también se puede recurrir a productos caseros con los que dejar la cama como nueva, libre de la suciedad y con un aroma agradable para cuando vayamos a dormir.

Lo primero que es importante realizar es un aspirado previo con el que retirar el polvo de la superficie. Después hay que espolvorear una pequeña capa de bicarbonato de sodio para que quede repartido por todo el colchón y dejar actuar durante 30 minutos. Una vez haya pasado el tiempo suficiente hay que utilizar un trapo con el que retirar el bicarbonato. Puedes utilizar también el aspirador de mano para quitar los restos.

Por último, y de forma opcional, se puede esparcir unas gotas de aceite de árbol de té para dar un toque agradable a nuestro colchón. Un truco que podemos percibir cuando nos volvamos a acostar en la cama por la noche.