Las Palmas de Gran Canaria homenajea un año más a los cuatro bomberos que murieron el 22 de mayo de 1986 durante las labores de extinción de un incendio en un taller mecánico de La Naval. Los asistentes han tenido un recuerdo especial para los cuatro bomberos víctimas del accidente, el cabo Enrique González Crespo y los agentes José Manuel Pérez Hernández, José Juan Llamas Mateo y José Juan Medina Rodríguez, y han mostrado la consideración del conjunto de la ciudad hacia estos profesionales fallecidos y los que resultaron heridos al estallar una bombona de acetileno en el local incendiado en el que ese momento estaban trabajando. "El mejor homenaje que podemos ofrecerles es seguir arbitrando mejoras en las condiciones de trabajo de los actuales y futuros bomberos, mejoras que les capaciten para afrontar con éxito todos los retos que Las Palmas de Gran Canaria tiene por delante en materia de seguridad, con el fin primordial de apuntalar y consolidar a nuestra capital como el lugar seguro y protegido que todos conocemos", apuntó el alcalde. Tras la ofrenda floral al monolito que recuerda el trágico accidente de hace 33 años, mientras un camión de bomberos hacía sonar su sirena, una violonchelista interpretó un tema en honor a los fallecidos tras el cual se guardó un minuto de silencio y se dio por finalizado el acto.