Mañana habrán transcurrido seis años desde que acaeciera una de las mayores tragedias aéreas de la historia de España. 154 personas perdieron la vida y 18 resultaron heridas cuando el avión JK5022, con destino Gran Canaria, de la desaparecida compañía Spanair iniciaba el despegue en el aeropuerto de Madrid Barajas. A día de hoy, todavía son muchas las familias que no han logrado pasar página en lo que a indemnizaciones se refiere. Son las que decidieron no entrar en el reparto de un total de 12,8 millones de euros ofrecidos por la empresa aseguradora Mapfre.

La Asociación de Afectados del Vuelo AVJK 5022 argumenta que la póliza de seguros que Mapfre pactó con Spanair en 2008 ascendía a 1.500 millones de dólares y critican que los reglamentos que se encargan de estas situaciones no obliguen a la aseguradora a cumplir dicho contrato. Según la asociación, no puede aplicarse a una catástrofe aérea la misma indemnización que a un accidente de tráfico, como intenta la aseguradora.

Todas las familias que no han aceptado la consignación de fondos que les ofreció Mapfre, han demandado a esta empresa en los tribunales. Siete de las demandas se presentaron en Las Palmas y otras nueve, en Madrid. Una de estas últimas incluye a 71 víctimas y las vista ya tiene fecha, se celebrará el 28 de noviembre.

Por otro lado, la AVJK5022 es la única parte que ha demandado al Estado español después de que la Audiencia Provincial de Madrid archivase el caso en 2012. "En marzo de este año la Asociación presentó una demanda contra el Estado español en el Tribunal de Derechos Humanos de Estrasburgo, porque a nosotros nos hundió en la miseria la decisión de sobreseimiento libre de los tres magistrados. Esto lo único que nos permitió fue presentar un escrito de nulidad de actuación ante la propia Audiencia y un recurso de amparo ante el Tribunal Constitucional, que lo inadmitió en un solo folio", relató la presidenta de la Asociación de Afectados del Vuelo AVJK5022, Pilar Vera.

El objetivo que persigue la asociación tras tres años y medio de litigios judiciales es depurar responsabilidades por la muerte de 154 personas y las lesiones de 18 supervivientes. Durante estos años, la AVJK5022 ha conseguido constituirse como un "referente" dentro del marco de asistencia a las víctimas de catástrofes aéreas, es decir, "ser como un Pepito Grillo, lo que no dicen los demás, lo dice la asociación", comentó Vera.

El año pasado, tras varios viajes a Bruselas, la AVJK5022 consiguió introducir en el reglamento europeo dos artículos que obligaban a los países miembros de la Unión Europea a tener un plan de asistencia a las víctimas, algo de lo que España carecía. También en 2013, el Ministerio del Interior publicó "el protocolo de coordinación de asistencia de las víctimas de accidentes de la aviación civil y familiares" y la asociación fue declarada de "utilidad pública", reconociendo oficialmente que su actividad persigue el beneficio colectivo. En este caso, los destinatarios son los grupos de personas que utilizan el avión para desplazarse, "un medio de transporte que para los canarios es imprescindible", recalcó Vera.

Este año, Interior reconoció en una publicación la participación de la AVJK5022 en la elaboración del protocolo de Coordinación de Recursos de Protección Civil, que hasta entonces contemplaba todos los sucesos catastróficos, tanto naturales como humanos, excepto los accidentes aéreos. "Que se reconozca nuestra labor requiere mucho esfuerzo y mucho trabajo", añadió Vera.

La Asociación de Afectados del Vuelo JK 5022 está impulsando en España la creación de una Red de Víctimas Españolas (Reves) uniendo a agrupaciones de otras tragedias, como YAK-42, Metro Valencia, Madrid Arena y Alvia 01455 Santiago. Además, la AVJK5022 está integrada en la Red Europea de Víctimas, en la que Vera es vicepresidenta primera, que algutina cinco países: Francia, España, Italia, Reino Unido y Bélgica. En el ámbito mundial colabora con la Alianza de Asociaciones de Víctimas (Acfva), que trabaja en la Organización Mundial de Aviación Civil, conformada por 191 países.