Energía

Autocontrol desestima una reclamación de Iberdrola a Repsol por "publicidad engañosa"

El organismo de control publicitario obliga a la eléctrica a pagar los costes del procedimiento

Archivo - Sede de Repsol

Archivo - Sede de Repsol / REPSOL - Archivo

Sara Ledo

Sara Ledo

Repsol gana la primera batalla en su particular guerra con Iberdrola. El organismo de control publicitario, Autocontrol, ha desestimado una reclamación de la eléctrica a la petrolera sobre publicidad engañosa de combustibles renovables al apreciar que no hubo ningún tipo de irregularidad, según la resolución emitida el pasado 4 de abril. El jurado del organismo ha impuesto a Iberdrola la pago de los costes del procedimiento.

Esta reclamación es independiente de la demanda interpuesta a la petrolera por "greenwashing", pero la filosofía de la reclamación es la misma: la supuesta publicidad engañosa de la petrolera. A ambas se suman las denuncias de las organizaciones Ecologistas en Acción, la Federación de Consumidores y Usuarios (CECU) y Greenpeace España presentadas ante la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC) y la Dirección General de Consumo, según han informado este martes estas organizaciones.

La queja de Iberdrola ante Autocontrol se produjo el pasado 10 de enero y se centra en una publicidad difundida en televisión, prensa e internet en la que se promocionan los nuevos combustibles renovables de Repsol con la siguiente alegación: "La calidad de Repsol ahora 100% renovable. A partir de residuos orgánicos. Ya disponible en más de 50 estaciones de servicio ya final de año en 600”; “Nuevos combustibles 100 % renovables de Repsol".

Iberdrola defende que esta afirmación es "contraria al principio de veracidad" porque "genera la impresión de que toda la actividad y productos de dicha compañía, ahora son 100% renovables". Además, duda sobre la veracidad del origen de este combustible, dado que "no se facilita ninguna información que permita determinar que el origen de esos combustibles que se publicitan sea 100% renovable", así como de que este tipo de carburante pueda ser utilizados por todos los vehículos.

Sin embargo, el organismo de control publicitario desestima todos esos argumentos a partir del informe de un "experto independiente" y obliga a la eléctrica a pagar los costes del procedimiento.

Autocontrol afirma que "no resulta posible aceptar que un consumidor medio, normalmente informado y razonablemente atento y perspicaz, pudiese asociar la alegación 'la calidad Repsol, ahora 100% renovable' a cualquier característica, producto o servicio de Repsol que no fueran específicamente los combustibles promocionados" y añade que la citada publicidad "incluye siempre la mención “Ya disponible en más de 50 estaciones de servicio y al final del año en 600".

Además, añade que Iberdrola no ha aportado "ninguna prueba" que permita "poner en duda el carácter renovable de los nuevos combustibles de Repsol", mientras que Repsol ha acreditado que los carburantes son elaborados con residuos orgánicos y cumplen las normas pertinentes, así como el sistema de garantías de origen renovable, por lo que el jurado concluye que "frente a la ausencia de cualquier prueba en el expediente de la que se desprendan elementos que permitan dudar del carácter 100% renovable de los combustibles promocionados, Repsol ha aportado un principio de prueba suficiente para sostener la veracidad de dicha calificación".

Denuncias de organizaciones ecologistas

Las organizaciones Ecologistas en Acción, la Federación de Consumidores y Usuarios (CECU) y Greenpeace España han llevado a cabo una investigación, durante 2022 y 2023, focalizada en el impacto de la actividad de Repsol sobre la deforestación en Indonesia y su contribución "en el aumento de las emisiones responsables del cambio climático" y han presentado sendas denuncias ante la Comisión Nacional de los Mercados y de la Competencia (CNMC) y ante la Dirección General de Consumo.

Según argumentan las demandantes, España es el principal importador de aceite de palma de Indonesia y el mayor productor de biocombustibles en la Unión Europea y la compañía petrolera es "una de las principales importadores" de aceite de palma y "productor de biodiésel con este aceite". "A partir de los informes periciales, las organizaciones denunciantes concluyen que la empresa Repsol esconde en la comunicación pública y en la publicidad la deforestación y otros impactos ambientales y sociales provocados para la producción del aceite de palma que se utiliza para la fabricación de sus biocombustibles", señalan en un comunicado.