La mejoría de las condiciones meteorológicas después de cuatro días de fuertes vientos, lluvias y nieve en la zona cumbrera permitió abrir ayer la carretera de La Aldea, la GC-200, cerrada desde el jueves, después de la retirada de las piedras caídas en la vía por el temporal.

Dos cuadrillas del Cabildo de Gran Canaria trabajaron ayer para restablecer el tráfico entre La Aldea y Agaete, con una de las cuadrillas retirando las piedras desde La Aldea a El Risco y la otra desde esa zona hasta la villa marinera. El consejero insular de Emergencias, Juan Manuel Brito, confirmó la reapertura de la vía y aseguró que el Cabildo estaría vigilante por si nuevos episodios adversos comprometían la seguridad en la GC-200.

Pero no fue la única buena noticia para el municipio aldeano, ya que las presas de la localidad han recibido hasta 4.000 litros de agua por segundo por las precipitaciones registradas desde hace cuatro días y que han sido bien recibidas por los agricultores al tratarse de una lluvia serena que no ha causado daños a los cultivos.

Si para los aldeanos ha sido toda una alegría la apertura de la carretera de acceso a Agaete, no menos ha sido la satisfacción de cientos de grancanarios que ayer se desplazaron a la zona cumbrera para disfrutar del manto de nieve que ha blanqueado las zonas altas de Gran Canaria y que presumiblemente durará varios días más.

El día se presentó tranquilo e incluso hubo quien aprovechó la mejoría de las temperaturas para irse a la playa, aunque fueron más los que prefirieron presenciar la nevada, un fenómeno meteorológico que no abunda en las Islas. La entrada a la Cumbre se habilitó por Valleseco y Pinos de Gáldar hacia Cruz de Tejeda, si bien también se podía subir por San Mateo, donde el tráfico fue desviado hacia Ariñez y Cueva Corcho para incorporarlo al circuito. El trabajo de limpieza realizado por los operarios del Cabildo permitió que después de unos días que se restringió el acceso a la zona alta de Gran Canaria por motivos de seguridad, los entusiastas conductores no desaprovecharon la oportunidad y se dirigieron hacia los lugares con más nieve para inmortalizar su presencia en el manto blanco formado.

Desde todos los rincones de la Isla se dirigieron, como si de una peregrinación o la inauguración de una gran superficie comercial se tratara, hacia la nieve. Familias enteras, algún que otro osado caminante o grupos de amigos se acercaron para disfrutar de un paisaje gélido poco habitual. El despliegue de más de 300 agentes por parte del Cabildo grancanario y la llamada a la precaución volvieron a repetirse para evitar situaciones de peligro para los ciudadanos.

Sinembargo, hubo imprudencias que provocaron que varios vehículos se quedaran atrapados a 300 metros del cierre o en cualquier punto de la Cumbre, estorbando el paso de los vehículos de Carreteras, Emergencias y hasta el quitanieves, por lo que hubo que sacarlos de la zona y depositarlos en el aparcamiento situado frente a la piscina de San Mateo, en la salida a Tenteniguada.

Asimismo, algunas personas que no pudieron salir y tuvieron que pasar la noche del sábado en el interior de su coche. Ayer pudieron retornar a sus hogares después de pasar una más que fría noche en sus vehículos, una experiencia para contar con bebida caliente.

La predicción de Meteorología para hoy es de cielos nubosos en el norte y variables en el resto, temperaturas iguales o con ligero ascenso y vientos flojos y sin aviso de feonómeno meteorológico adverso.