Los vecinos del barrio de la Vega de San José advierten de que el tráfico en el entorno del Palacio de Justicia "ya es un caos", y que los nuevos accesos que abrirá el Gobierno de Canarias desde la Avenida Marítima al interior de la zona solo servirán para "colapsar" más las calles.

"¿Dónde van a aparcar esos 1.300 trabajadores que van a realizar su labor en el Palacio de Justicia o los más de 4.000 usuarios diarios que irán a solventar sus problemas con la Justicia?", se pregunta el presidente de la Asociación de Vecinos de la Vega de San José-Cono Sur, Óscar Roque. "Llevamos insistiendo desde hace años en los problemas de circulación y aparcamientos que tenemos y, por ello, hemos pedido la elaboración de un plan especial para la Vega de San José, pero pese a las reuniones que hemos mantenido siguen sin hacernos caso".

El Gobierno de Canarias llegó ayer a una solución consensuada con el Ayuntamiento capitalino y el Cabildo insular para abrir dos nuevos accesos desde la Avenida Marítima (GC-1), uno de doble carril desde la calle Alcalde Díaz Saavedra, y otra entrada varios metros más adelante que enlazará con la calle Alicante.

"Lo que no puedo entender", continúa Roque, "es que si conocen este problema desde hace tantos años sea ahora cuando llegan a estos acuerdos para los que, además, no han contado con el consejo de los vecinos". El representante vecinal, asegura asimismo, que las 400 plazas del nuevo aparcamiento son "como un grano de arena en el desierto" y augura "el caos total" porque la circulación en la Vega de San José "ya es un caos hoy en día".

Vecinos sin aparcamientos

Los vecinos que tienen sus casas en los alrededores de la calle Eufemiano Jurado denuncian, además, el abandono en el que les ha dejado el Ayuntamiento de Las Palmas de Gran Canaria después de prometerles que les tendrían en cuenta a la hora de darles un trato preferencial para el aparcamiento. "Nos han dejado con una plaza de descarga para vecinos y dos de minusválidos", explica uno de los residentes, Alexis de León.

"Cardona y Sabroso nos prometieron una subvención para acceder a los nuevos aparcamientos, pero no se han puesto en contacto con nosotros y tampoco nos cogen el teléfono", asegura.

Los nuevos accesos, por otro lado, van a empeorar una situación ya de por sí muy mala. "El tránsito de vehículos es elevado y muchas veces se forman disputas vecinales por ello", explica. Además, "en la zona hay cuatro colegios y si en hora punta esto ya es una ratonera terrible, no quiero ni pensar qué va a pasar cuando entren todos los funcionarios a trabajar".

Roque, por su parte, recuerda que durante todos estos años le han ido quitando salidas al barrio: "Teníamos salida por la calle Granadera Canaria, pero la cerraron; lo mismo pasó con la de Santa Ana y con la de la Comandancia de la Guardia Civil; esto va a explotar".