Este año el barrio de Vegueta ha acogido en sus calles diferentes celebraciones para el disfrute de miles de personas. Hace poco fue el fin de año en agosto, y ahora la Asociación Vegueta de Ocio y Restauración (AVOR), quiere invitar a todos su propia Oktoberfest. Unos 6.000 litros de cerveza, comida alemana, decoración germana, música del país y vestimenta típica son algunas de las propuestas básicas para la celebración de la fiesta en el segundo fin de semana de octubre, del 11 al 13 de este mes.
La idea de llevar a cabo en la ciudad esta celebración mundialmente conocida por la original que tiene cita en Munich, viene de Ramón Sainz-Rozas, propietario de la cervecería Te lo Dije Pérez, situada cerca de la Catedral, en Santa Ana. En 2010 llevó a cabo este acto en su local. Este primer año fue de prueba, pero ya en 2011 todo fue más en serio, y ya desde entonces "cada edición hemos ido mejorando", aseguró Sainz-Rozas. "Este año AVOR nos pidió hacerlo para toda Vegueta. Yo estoy en la directiva y nos hemos encargado tres personas en prepararlo. Será una fiesta mucho más grande que las que he hecho anteriormente en mi local", añadió.
Lo que se quiere con este proyecto es hacer una copia de la Oktoberfest de Munich, como hacen otras ciudades del mundo, con calidad: "El tema es hacer algo dinámico, divertido y bueno, buscamos calidad. Convertir esta fiesta en una verdadera, no hacer cosas extrañas. Demostrar que en Las Palmas de Gran Canaria también se puede. En mi cervecería siempre hemos tenido éxito, pero con esto queremos hacer una fiesta grande", explicó el dueño de Te lo dije Pérez. Para tener resultados de calidad, se requiere contar con buenos productos y servicios. La cerveza, que es el artículo estrella de este festival, ha sido especialmente seleccionada: "Hemos mandado a hacer una cerveza específica en Alemania. Esta que se hace con menos burbujas para que llene menos. Es especial y se llama la cerveza de marzo, porque el trigo para hacerla se recoge en este mes. Después se prepara", contó Ramón.
Además de la bebida por excelencia, la comida es algo que también se quiere cuidar. Para ello, se quiere ofrecer a los clientes gastronomía típica alemana como salchichas, codillo, chuletas ahumadas del país, chorizos alemanes con sabor a beicon... "En fin, una serie de productos alemanes que ya se han hablado. Tenemos contactos también con panaderos alemanes, para traer el brezel, que es el pan típico alemán", agregó el organizador.
La ambientación adecuada es algo que no puede fallar. Para ello van a poner bancos de 2,20 metros de largo, para que todos se sienten con todos y "sean días de hacer amigos y charlar con el de al lado". También habrá música alemana "enlatada, ya que los locales no están centrados en la plaza Santa Ana, por ejemplo. No se puede poner un grupo de música, aunque para el próximo año se quiere poner uno que desfile por todas las calles", declaró Sainz-Rozas. Que los trabajadores de los restaurantes participantes vayan vestidos de "alemanitos" es un requisito imprescindible. Así, aquellos clientes que decidan ir también con las ropas típicas alemanas, serán premiados, y entrarán en concursos para llevarse diferentes premios.
La inauguración del encuentro será el viernes 11 de octubre sobre la 13.30 ó 14.00 horas, "adaptando los horarios para que la gente que salga el viernes de trabajar también pueda venir", agregó. Será delante de su local, y para realizar este acto se espera que estén presentes el alcalde de la ciudad, Juan José Cardona, y el cónsul alemán en la Isla, Peter Schmid. Estos serán los encargados de abrir el barril, tal y como se inaugura en Munich, y así da comienzo la fiesta. "Entonces, se dará un chupinazo para dar un toque y que así todos los locales abran al mismo tiempo con su cerveza y demás", aclaró el impulsor de la idea.
La celebración durará desde el viernes en el momento del chupinazo dé comienzo, hasta el domingo a las seis de la tarde. Serán tres mañanas y dos tardes-noches disponibles para el disfrute de todos, desde familias hasta parejas o grupos de amigos que quieran saber lo que es vivir un encuentro multitudinario y divertido como este. "Es una fiesta de conocer gente. En las mesas caben diez personas, cinco por cada lado. Vienes con tu pareja, por ejemplo, pero acabas conociendo a todos los de la mesa. Haces amigos cada tres minutos", relató.
En cuanto a los gastos, añadió que "AVOR ayuda, y que el Ayuntamiento colabora. El concejal de la zona, Christian Santana, nos apoya. Gracias a ellos podemos hacer esto, si no, no podríamos, por tratarse de un espacio público. Referente al presupuesto, entre publicidad y poco más hablamos de 1.000 euros para el arranque, después, cerveza y demás son cosas aparte. Pero para eso nos hemos unido en AVOR, el dinero de arranque es de la Asociación. Pensamos que dará buenos resultados. Lo vamos a hacer bien".
Un proyecto "serio por parte de sus organizadores, y divertido por parte del público". Y un festival al que no todo el mundo puede acudir por la lejanía del lugar de su celebración, pero que se ha querido traer a la Isla para que los cu-riosos sepan "lo que es una vela- da así conocida a nivel mundial. Este año se podrá constatar en la ciudad de lo que se trata, y, con la jarra de un litro en mano, bien alzada, se brindará por su celebración futura". Quién sabe si aquí o cerca de Berlín.
