El Ayuntamiento de Las Palmas de Gran Canaria autorizó en la mañana de ayer el baño en la mayor parte de la playa de las Alcaravaneras tras comunicar Sanidad del Gobierno de Canarias el buen estado de las aguas en los tercios norte y centro de la misma una vez que se ha disipado casi en su totalidad el vertido de combustible y aceite de origen desconocido que afectó a esta zona del litoral capitalino desde el pasado lunes.

No obstante, la prohibición al baño se mantiene para una parte del tercio sur de la playa, entre 40 y 50 metros, en los que, tras la inspección realizada ayer por técnicos de la Consejería de Sanidad, se han observado aún algunas iridiscencias en el agua producto del vertido de fuel. En esta zona seguirán instaladas las vallas y la cinta de prohibición.

La concejalía del Ciudad de Mar decretó el cierre temporal de la playa el lunes, 10 de octubre, tras la detección por parte de operarios municipales de un vertido de combustible procedente de la zona portuaria. De manera inmediata se activó el protocolo de respuesta ante estas situaciones, alertando a los responsables del Puerto para su inmediata limpieza y recogida de restos contaminantes.