Enrique Sánchez Gaviria era abuelo del protagonista de esta historia. Un gran emprendedor que montó una fábrica de fundición y herrería en la calle Mayor de Triana en Las Palmas de Gran Canaria allá por 1891. De casta le viene al galgo, sentencian los castizos. Enrique Sánchez Romero, que en su día se presentaba como el padre de Mercedes, una periodista entonces del equipo digital de LA PROVINCIA, es una figura notable de la empresa y la sociedad grancanaria que ha tenido la feliz iniciativa de poner por escrito la obra de su vida y de su familia.

La segunda generación de la familia con los talleres de fundición correspondió a los Hijos de Enrique Sánchez, Manuel, Enrique y Francisco Sánchez Camacho, que trasladaron la industria a la calle Perojo y mantuvieron una ferretería en la calle de Triana. Liquidaron a finales de la década de 1960. Desde ahí arranca una nueva historia de la descendencia de Enrique Sánchez Gaviria que ahora protagoniza Enrique Sánchez Romero, hijo de Manuel Sánchez Suárez.

Enrique Sánchez Romero. L.P.

La prematura muerte de su padre en 1959 dejó viuda a su madre Mercedes Romero Núñez con 44 años. Gallega de origen, también llevaba en su espíritu las raíces del emprendimiento y el negocio. Mercedes Romero marcó una época con una boutique de moda en un local de la calle León y Castillo.

Pero no se trata aquí de resumir el libro Una biografía de Enrique Sánchez Romero. Historia de una barca llamada ‘fe’ y unos remos llamados ‘voluntad’, que ha elaborado el escritor italiano Enrico María Rende. Además de ser imposible reducir a estas columnas sus más de trescientas páginas.

Autoridad moral

Nacido en Las Palmas de Gran Canaria el 29 de diciembre de 1940, licenciado en Ciencias Económicas, en una Universidad Complutense en plena efervescencia, atesora amplios conocimientos teóricos y prácticos de su experiencia en las Islas y en otros continentes, que le permitieron pasar, con máxima capacidad, de directivo a empresario. Al hablar de Enrique Sánchez es obligado citar a Huarte, que ya es historia, y a VVO Grupo. Este ejecutivo, grande en cuerpo y alma, de transparente conducta personal y autoridad moral, ha demostrado con su buen hacer con un esfuerzo tan audaz como noble para disfrutar una trayectoria de merecido agradecimiento social. Un reconocimiento que le permite recibir satisfacciones no solo de la sociedad sino también de sus propios hijos Manuel, Enrique, Mateo, María, Mercedes y Pablo, fruto de su feliz matrimonio con Chicha Prada.

Este es el momento de los soñadores, los tesoneros, los altruistas y los esforzados, el de los emprendedores y laboriosos. Este es el momento que ha encontrado a Enrique Sánchez dedicado a su familia, sus empresas, su tierra canaria y su patria España. La presentación de su biografía en el Hotel Santa Catalina ha sido una buena noticia y una oportunidad para demostrar su capacidad de irradiar cordialidad.