Los delitos que más alarman a los canarios son los robos con intimidación y en viviendas. Pese a ello, existe entre la ciudadanía un sentimiento de que "Canarias es una tierra segura". Así lo expresó ayer el jefe Superior de Policía en Canarias, Valentín Solano, durante el acto conmemorativo de la festividad de los Ángeles Custodios, el Día de la Policía, donde se condecoraron a 31 miembros del cuerpo y a ocho personas ajenas al mismo.

Solano reveló que el número de detenidos por robos con intimidación ha aumentado un 25% y se ha esclarecido más de la mitad de los casos, y los hurtos en viviendas descendieron un 30% el año pasado y, en lo que va de año, han disminuido un 11%.

En general, la delincuencia descendió en Canarias un 5,12% en 2013, y en el primer semestre las infracciones penales bajaron un 5,5%, de las cuales un 7,6% fueron en la provincia de Santa Cruz de Tenerife y un 3,7% en la de Las Palmas.

En este contexto, la tasa de criminalidad es de 42,8 infracciones por cada 1.000 habitantes, más de dos puntos por debajo de la media nacional que se sitúa en el 45,1, según la delegada del Gobierno, María del Carmen Hernández Bento, presente en el acto celebrado en la Comisario del Distrito Norte en la capital grancanaria, al que acudieron en torno a unas 400 personas entre familiares y personalidades de la vida política, militar y social de las Islas. Hernández Bento destacó que Baleares, siendo también una comunidad turística, está 20 puntos por encima del Archipiélago en tasa de criminalidad.

Valor añadido

A su juicio, la "seguridad en Canarias es un valor añadido y diferenciador con otros destinos turísticos competidores". Por ello, agradeció "el fruto de la lucha eficaz contra el delito y la delincuencia" por parte de la Policía Nacional y de la Guardia Civil en las Islas, que cuentan con 3.867 agentes policiales y 3.370 guardias civiles. Además, resaltó el "buen trabajo que se está haciendo en el control de fronteras y la lucha contra la inmigración irregular con las autoridades de Marruecos y Mauritania".

Durante el presente año, han llegado al Archipiélago 15 embarcaciones, con 230 inmigrantes. Aún así, la delegada del Gobierno afirmó que "es necesaria una política común de inmigración en la Unión Europea que fomente la cooperación con los países de origen, acabe con las mafias que trafican con seres humanos y ordene los flujos migratorios hacia Europa".

Asimismo, las acciones policiales han logrado desmantelar estructuras dedicadas al narcotráfico y a la trata de seres humanos. En el marco de estas operaciones, en Canarias se han detenido más de 50 personas y han sido incautados más de 1.200 kilogramos de droga. Una de las más importantes fue la operación Tulipán, donde se confiscó el mayor alijo de anfetaminas de Europa -con 148 kilogramos-. Además, según Solano se han desmantelado numerosos cultivos de marihuana, actividad delictiva que se ha incrementando durante los dos últimos años.

Precisamente, tres de los condecorados trabajaron en la operación Tulipán. Uno de ellos es Juan Carlos Tejero, subinspector del Cuerpo Nacional de Policía, que presta servicio en la unidad de drogas y crimen organizado. Recuerda que la droga incautada venía de Holanda por vía terrestre disuelta en el depósito de gasolina de un vehículo y en un laboratorio en Madrid se procedió al tratamiento químico y se extrajo el sulfato de anfetamina. Una parte de esa droga debía llegar a Canarias, pero mediante intervenciones telefónicas desde las Islas, tras una investigación de un año y medio, se logró paralizar la operación.

Mérito triple

Ésta es la tercera medalla al mérito policial con distintivo blanco de este policía madrileño que lleva 24 años en el Archipiélago. Pese a la alegría de la condecoración, tenía ayer un sabor agridulce porque por "esta operación no hemos sido condecorados todo el grupo sino unos pocos, cuando el sentir es un servicio colectivo y deberían recibir la distinción los nueve compañeros".

Otro de los homenajeados fue José Luis Lázaro, jefe regional de Operaciones. Se considera el policía más antiguo del país, tras 46 años, dos meses y 21 días de servicio. "No ha habido nunca nadie en la historia reciente de la policía de España que haya estado tanto tiempo como yo en activo", afirma.

Cumple 65 años mañana y se jubila el lunes. De origen aragonés, lleva dos años y medio en la Isla y después de numerosos destinos y 12 distinciones en su haber por distintas acciones, entre ellas de lucha contra terrorismo, se retira para estar con sus nietos "canariones". Su hijo también es inspector en la capital grancanaria. A su juicio, "la única razón de ser de la policía es el servicio al ciudadano", por ello, recomienda a los que entren que tengan vocación y no la consideren como una profesión de recurso. Aparte de los policías nacionales, recibieron condecoraciones autoridades militares, de la Policía Local, y, entre otros, el presidente de la Audiencia Provincial de Las Palmas, Emilio Moya.

En la puerta, distintos sindicatos policiales se manifestaban por el traslado del edificio de la Comisaría del Distrito Centro. Solano explicó al respecto que existe un convenio entre administraciones para construir una nueva comisaría en Siete Palmas.