Sin ‘musha’ confianza

La de esta tarde puede ser uno de esos días plácidos para el Granca dado que se enfrenta a un Real Betis Baloncesto (18.45 horas, Movistar Deportes 3) que ocupa lo más hondo de la tabla clasificatoria con tan solo dos triunfos cosechados en los trece partidos disputados hasta la fecha. Plácido sobre el papel, pero en el que Jaka Lakovic, entrenador del conjunto insular no quiere «confianzas» de sus jugadores. Un tópico en este tipo de partidos, pero la advertencia del esloveno está ahí.

«Debemos ser conscientes que tenemos que jugar de la misma manera que contra el Valencia», trasladó ayer el entrenador amarillo. Esa supuso la primera victoria claretiana para salir de un bache de tres derrotas seguidas –Bilbao Basket, Cazoo Baskonia y UCAM Murcia– en la que el navío insular brindó una fiesta ofensiva a la afición de Siete Palmas, aunque eso sí, las señas de identidad defensivas con las que quiere el balcánico sobre las que se sostenga el Granca no aparecieron al conceder 89 puntos –los locales anotaron 95–.

Frente al Valencia uno de los que también salió de su atolladero individual fue Andrew Albicy. El francés, que ha reconocido publicamente que no estaba pasando por un buen momento, cuajó una brillante actuación y dio sensación de haber pasado página.

Esta tarde tiene ante sí la ardua tarea de defender al máximo anotador de la Liga Endesa, Shannon Evans. El base norteamericano copa la estadística con 20,3 puntos cada noche para asimismo mantenerse al frente de las estadísticas en las medias de: valoración (20,7), minutos (32 por encuentro), tiros libres lanzados (4), faltas recibidas (5,8) y recuperaciones (1,8). A la vez que es el quinto que más asistencias da con 5,7 por encuentro jugado

Sin embargo, también cabe tener en cuenta que es el jugador que más pérdidas de balón comete por choque con 3,4 sobre la pista de juego. Un peaje que tiene que asumir el ex entrenador del Granca, Luis Casimiro, pero que dada la plantilla con la que cuenta la entrega un año más las llaves al jugador más determinante del campeonato.

Una plantilla confeccionada todavía por el ex director deportivo del club claretiano, Berdi Pérez. Quien la temporada pasada tiró de agenda para contratar a Beqa Burjanadze, Anzejs Pasecniks, Jacob Wiley y Eulis Báez, todos con pasado insular, este curso tan solo el dominicano es el que inició el año.

Eso sí, desde ayer se le unió un viejo amigo en el vestuario de Siete Palmas. Berdi Pérez volvió a tirar de viejos contactos y firmó a Luke Fischer, pívot que disputó 43 partidos con la camiseta del Granca en la ACB y que llega a Sevilla para complementarse en la pintura con Volodymyr Gerun –segundo máximo reboteador ofensivo de la ACB con 2,6–, Yannick Nzosa y Georgios Tsalmpouris.

El interior griego está siendo una de las sorpresas del año, al destacar su verstatilidad como jugador alto que puede lanzar desde lejos y por ende Lakovic lo destacó. «Es un pívot que puede abrir el campo y tirar bien de tres, pero a la vez tenemos que estar concentrados en otras amenazas más allá de esta y la de Evans como con Bertans o B.J. Johnson».

Asimismo, el esloveno pretende quitar presión a sus jugadores respecto a la clasificación para la Copa del Rey. En principio, la media de la última década dice que con 10 triunfos el billete para el torneo del KO se certifica. Es decir, si el Granca vence dos partidos más de los cuatro que le restan –además del Real Madrid el domingo, Joventut en el Arena y frente al Fuenlabrada–, seguramente esté en Badalona en febrero para regresar a una cita que no disputa desde hace cinco años, precisamente en la Isla.

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