El productor grancanario Adrián Guerra produce la primera película de Mario Casas como director

El productor grancanario Adrián Guerra, responsable de la empresa internacional Nostromo Pictures junto a Núria Valls, produce la primera película de Mario Casas como director, Mi soledad tiene alas, que se estrena en salas nacionales el próximo 25 de agosto. 

Se trata de la segunda -pero no la última- colaboración entre Guerra y Casas, quienes coincidieron en 2015 en la exitosa Palmeras en la nieve, coproducida por Nostromo y rodada en distintas localizaciones de Gran Canaria, como la Finca de Osorio, donde Casas compartió cartel con las actrices Adriana Ugarte y Berta Vázquez. 

El debut del popular protagonista de No matarás o Tres metros sobre el cielo al otro lado de la cámara reviste tintes autobiográficos que se miran en los comienzos precarios del actor y director en la perifera de Barcelona en la década de los 90. Así lo relata el propio Casas en la campaña promocional de la película, donde revela los entresijos de su ópera prima como introducción del tráiler oficial, que ya se exhibe en cines de toda España como aperitivo de su lanzamiento. 

'Mi soledad tiene alas' narra una historia de delincuencia y amistad juvenil con aroma neoquinqui

En este prefacio, Casas explica que puso especial atención al casting del reparto, que no podía liderar sino su hermano, el actor Óscar Casas, en el papel de Dan, y que completan los debutantes Candela González y Farid Bechara, en las pieles de Vio y Reno, respectivamente. Así, Mi soledad tiene alas narra una historia de delincuencia y amistad juvenil con aroma de cine neoquinqui, pero también de exploración y superación personal frente a los fantasmas del pasado, basada en un guion escrito por Casas junto a la cortometrajista Déborah François, que pergeñaron durante el confinamiento del Covid en la primavera de 2020.

«Esta película ha sido uno de los viajes más importantes de mi vida», manifiesta Mario Casas

«Esta película ha sido uno de los viajes más importantes de mi vida», manifiesta Casas en la introducción de la campaña. «Me vi con la necesidad de hacer algo que al final, por trabajo y demás, no tenía el tiempo de hacer, que era escribir». El resultado vive su puesta de largo en pantalla grande en las salas de cine de toda España y luego recalará en Netflix, que coproduce el filme junto a Nostromo y el Instituto de la Cinematografía y de las Artes Audiovisuales (ICAA).

Y en paralelo, el tándem Casas-Guerra culminó hace dos semanas el rodaje del largometraje Escape, protagonizado por el primero y producido por el segundo, bajo la dirección de Rodrigo Cortés. Y es que este cineasta es el director fetiche del productor grancanario, responsable de la producción de su primer gran éxito, Buried (2010), protagonizado por Ryan Reynolds, seguido de Luces rojas (2012), Down a Dark Hall (2018), rodada en Gran Canaria con Uma Thurman como protagonista, y El amor en su lugar (2021).

Por su parte, Escape es un drama carcelario con un elenco de lujo, encabezado por Mario Casas junto a Anna Castillo, Guillermo Toledo, Blanca Portillo, José Sacristán y Josep Maria Pou, que verá la luz el próximo 2024. En cuanto a su debut como director, Mario Casas ha manifesto con la mirada puesta en el horizonte que «me gustaría seguir dirigiendo. Pero depende de que esta película consiga transmitir algo y se quede en un, pongamos, un cinco».