El proyecto Carmen sigue afianzado once meses después de su creación

El sueño que tuvo un día Rosi Sánchez con el que honrar el adiós de su madre cada vez está más que afianzado. El proyecto Carmen sigue adelante once meses después de que se presentara ante la sociedad y cada vez son más mujeres las que se reúnen cada semana para continuar su lucha con el cáncer de mama.

Porque lo hayan padecido en el pasado o convivan con él actualmente, la batalla contra el bicho no cesa. Ahí, el baloncesto aparece como «una válvula de escape» como explicaba Margarita Ramírez en octubre del año pasado sobre el planteamiento del proyecto.

Martes y jueves están marcados en el calendario de las quince mujeres que se citan en La Vega de San José cada semana para compartir un ambiente lúdico a través del baloncesto y crear un tejido común con el que batallar frente al cáncer.

El proyecto Carmen es uno de los tantos apéndices que lleva a cabo el club desde la llegada del presidente Sitapha Savané a la entidad claretiana con el desarrollo del Compromiso Granca, que tiene miras sociales más allá de la competición deportiva.

Junto a la Asociación Española Contra el Cáncer, el Gran Canaria intenta dar mayor visibilidad a la batalla contra el cáncer de mama y las formas con las que afrontarlo.

La práctica deportiva, como vía para que las componentes del proyecto no sean tentadas por la vida sedentaria es una de ellas y el parqué de La Vega de San José les recibe dos días cada semana para mantener una actitud saludable con el ejercicio físico a través de la canasta y su entrenamiento.

Además, se recuerda que la detección precoz es fundamental tanto en mujeres como hombres.