Industria refuerza el programa de defensa del espacio aéreo canario

El Ministerio de Industria refuerza el programa de defensa del espacio aéreo canario. El Consejo de Ministros aprobó ayer las normas reguladoras para la concesión de un préstamo de 1.397 millones de euros para el programa Halcón, que incluye la renovación de la flota de la base grancanaria de Gando. La inversión irá destinada al desarrollo de nuevas versiones del caza Eurofighter.

El parque aéreo del Ejercito del Aire y del Espacio en el Archipiélago está compuesto por aviones F18, que a partir de 2026 se irán sustituyendo progresivamente por 20 Eurofighter Typhoon -16 monoplaza y cuatro biplaza-, que han costado a las arcas públicas cerca de 2.000 millones de euros.

Lo que marca la diferencia entre ambas aeronaves es la tecnología superior del Eurofighter. Cuenta con un radar de barrido electrónico que mejora la capacidad de detección de blancos, así como elementos de conectividad más modernos y eficaces frente a posible enfrentamientos.  

Además, la velocidad de crucero que estas nuevas aeronaves pueden sostener duplica a la que puede alcanzar el sonido. Pueden viajar a 2.200 kilómetros por hora, mientras que los F18 tienen su máximo en 2.000. El consumo de combustible a altas velocidades también es mucho más eficiente. En definitiva, no es un caza furtivo, pero su capacidad de sigilo es muy notable. 

La base militar grancanaria sustituirá los F18 actuales por 20 cazas Eurofighter

Todas estas ventajas han convertido a este halcón en uno de los mejores modelos que se encuentran ahora mismo disponibles en el mercado. Una tecnología que el Gobierno central quiere continuar potenciando con este préstamo. La inversión engloba trabajos de investigación, calificación, certificación e integración de nuevos equipos para mantener las capacidades ingenieras de Airbus DS -que ensambla y prueba los aviones en sus instalaciones de Getafe- , ITP AERO y otras empresas españolas que se dedican a la fabricación de estos cazas. Así, el impacto económico esperado de esta apuesta por la innovación «es positivo para la industria aeronáutica y de defensa española», destacó ayer Madrid en un comunicado.

Gando está inmerso en un plan de implantación para adecuarse a los cambios que requiere la llegada de nuevo armamento. Los hangares tienen que acondicionarse a sus nuevos inquilinos, que requieren algunas modificaciones en los sistemas que dan servicio al mantenimiento de las aeronaves, como las conexiones eléctricas o los sistemas auxiliares del avión. Los ajustes serán progresivos y se irán ejecutando a medida que vayan llegando los halcones recién adquiridos dentro de tres años. 

La veintena de profesionales que componen el 462 Escuadrón recibirán una formación específica para adaptarse al avión. Todavía no han iniciado el proceso en la unidad de conversión operativa que se encuentra en la base aérea sevillana de Morón, pero sí están realizando algunas acciones de familiarización con tácticas, técnicas y procedimientos para iniciarse en la tarea.

Alto índice de corrosión

El enclave militar de Gran Canaria es la segundo con mayor índice de corrosión en el mundo. El viento, la temperatura, la humedad, el salitre y la composición del suelo forman el cóctel perfecto para desgastar el fuselaje de las aeronaves. Los Eurofighter, que actualmente solo operan desde las bases de Sevilla y Albacete, no cuentan con ninguna adaptación específica para operar en estas duras condiciones, pero se les realizaran los mismos controles que a los F18. 

La inversión está enfocada en el desarrollo de nuevas versiones del ‘halcón’ europeo

Este préstamo de 1.397 millones servirá para cubrir parcialmente los gastos del programa Halcón que está llevando a cabo el Consorcio Español para el Desarrollo Industrial del Programa Eurofighter, y que enmarca la modernización de la protección de las Islas vía área. Este consorcio también recibió ayer otra una partida del Estado por valor de 1.750 millones de euros para cubrir la modernización, evolución y apoyo logístico del avión EF 2000 (III). Ambas inversiones se han concedido dentro del programa internacional Eurofighter, que es el proyecto de defensa más grande de Europa, en el que Alemania, Reino Unido, Italia y España son los principales socios. Está gestionado por la Agencia de Gestión de Eurofighter y Tornado de la OTAN.

El sector español de defensa es exportador. El 45% de su facturación anual proviene de las transacciones que las compañías realizan fuera de nuestras fronteras. Solo en 2021, los ingresos obtenidos ascendieron a 7.249 millones de euros. Además, este tejido industrial posee un importante efecto arrastre, al tiempo que invierte el 11% de sus ganancias en I+D. Una huella que se traduce en más de 20.000 empleos directos, indirectos e inducidos a lo largo del país. 

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