Las personas que venden en Vinted o Wallapop reciben esta mala noticia de Hacienda: será obligatorio en 2024

Las plataformas de compra y venta de productos de segunda mano se han hecho muy populares entre las personas que quieren sacar de su armario prendas que ya no usan, y gracias a ellas se ganan unos euros. Estas webs como Wallapop, Vinted o Milanuncios sirven de contacto entre el comprador y el vendedor, y luego se quedan con algunas comisiones por esta transacción. Los usuarios solo tenían que poner el producto, alguien les contactaban y ya hacían la operación, sin embargo, a partir de 2024 Hacienda obligará a los vendedores a declarar esto.

La Ministra de Hacienda, María Jesús Montero, ha confirmado que el año que viene la Agencia Tributaria se pondrá muy seria con este tipo de comercio online porque supone un riesgo para el sistema tributario. Estas operaciones entre particulares, deben llevar impuestos incluidos, a pesar de que las plataformas lo obvien cuando se vende el artículo. El objetivo de Hacienda para 2024 es fiscalizar las operaciones y así evitar el fraude.

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Wallapop, Vinted, Mil anuncios, eBay...

La polémica viene de lejos porque ya en 2017 el ministro Cristóbal Montoro hablaba de "interpretar la legislación vigente" para hacer frente a estas situaciones. Desde ese momento no se ha avanzado nada, y los distintos gobiernos no se han puesto de acuerdo para establecer una ley que regule estas ventas y los impuestos que deberían llevar los productos. Vinted generó en 2021unos 245 millones de euros de ingresos y 184 millones en facturación un año antes.

Estas cifras se quedan en nada con los más de 260 millones de la empresa en 2022. Por su parte, Wallapop es la web de este tipo con más valor de mercado con 771 millones de euros. A diferencia de su competidora más directa, esta sirve para vender todo tipo de productos, desde ropa a vehículos o muebles. Esto le ha permitido tener un crecimiento del 260% entre 2019 a 2022 hasta facturar más de 100 millones de euros.

Otra de las páginas que son referencia de este sector es Milanuncios, que ha publicado un estudio donde revela que este negocio mueve anualmente en España 5.200 millones de euros. La cifra ha aumentado con respecto a años anteriores a causa de la inflación. Según explica el portal, "la subida generalizada de los precios a raíz de la inflación, una mayor conciencia medioambiental del consumidor, sumado al impulso del gasto en artículos de segunda mano tras la Pandemia, ha hecho despegar este sector, ya que hasta un 45% de consumidores afirma vender productos a través de estas plataformas".

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La Agencia Tributaria pone excepciones

Si nos atenemos a lo que dice el Real Decreto Legislativo 1/1993, del 24 de septiembre, los vendedores en este tipo de plataformas para vender artículos de segunda mano deberán declarar los ingresos a través del Impuesto sobre Transmisiones Patrimoniales (ITP) que tiene un gravamen del 4%. Al ser entre personas físicas las que realizan la venta y no empresas, se debe aplicar este tributo, si fuera otro tipo de comercio, el que gravaría a los productos es el IVA. Pero que no cunda el pánico, porque Hacienda pone barreras a las plataformas.

Los vendedores solo tendrán que declarar cuando sus ingresos superen los 2.000 euros anuales o cuando no se realicen más de 30 operaciones en un año. Sin embargo, sí se fiscalizarán todas las transacciones. Esto viene como una exigencia de Bruselas después de que el Consejo Europeo emitiera la Directiva DACC7 2021/514 para "prevenir el fraude fiscal, la evasión fiscal y la elusión" obligando a las plataformas a comunicar "las rentas obtenidas a través de plataformas digitales en una fase inicial, antes de que las autoridades tributarias de los Estados miembros lleven a cabo sus liquidaciones de impuestos anuales". La proliferación de este tipo de compañías ha hecho que la Unión Europea tome cartas en el asunto y ponga el foco en evitar fraudes y delios fiscales.

Las aplicaciones estarán obligadas a informar a la Hacienda de sus respectivos países sobre todas las operaciones que impliquen el trato entre dos personas en la venta de un producto y que provengan del alquiler de inmuebles, de la prestación de servicios personales, la venta de bienes o el alquiler de medios de transportes. Estas tendrán que poner a disposición de la Agencia Tributaria los datos bancarios (número de cuenta o tarjeta vinculada), el dinero que ha obtenido el usuario cada trimestre, el número total de transacciones que se han realizado y las tasas o impuestos que se han cobrado en la venta.