Ocho de cada diez empresarios canarios facturarán más este año pese a la incertidumbre económica

Los empresarios canarios parecen no tenerle miedo a la incertidumbre económica. O al menos tienen más confianza que sus homólogos en el resto del país. Ocho de cada diez prevé que facturará más este año y la mitad tiene intención de contratar personal. De esta manera, la inflación, la incertidumbre política a nivel nacional o la inestabilidad geopolítica internacional, aunque preocupan al empresariado canario, no minan su moral, y la mayoría cree que sus negocios podrán resistir el embate y su situación mejorará a lo largo de estos doce meses.

A través de una encuesta elaborada por KPMG -una de las firmas de consultoría y auditoría más importantes del mundo perteneciente a las Big4- en colaboración con la Confederación Canaria de Empresarios (CCE), los directivos canarios han podido evidenciar las buenas perspectivas que tienen acerca de la marcha de sus empresas. El 82% de los encuestados considera que su situación es "buena" o "excelente" y un 48% confía en que la evolución este año será a mejor. Un porcentaje que se encuentra cuatro puntos por encima de la media nacional y que se traduce en que apenas uno de cada diez cree que empeorará.

Sus previsiones sobre facturación, inversión y plantilla son igualmente buenas en su mayoría. El 40% apunta que sus ingresos crecerán al menos un 5% mientras que otro 37% pronostica que subirán más de ese porcentaje. Asimismo, el 61% mejorará sus inversiones. Los empresarios canarios también son optimistas respecto a la contratación. Apenas el 13% tiene previsto reducir sus plantillas este año mientras que uno de cada cuatro las acrecentará hasta un 5% y otro 22% quiere hacer contrataciones más allá de ese porcentaje.

Y todo esto en un escenario económico complejo, lleno de incertidumbres que no les son ajenas al tejido económico en el Archipiélago. El presidente de la Confederación Canaria de Empresarios advierte de que el Archipiélago "no va a quedar al margen del enfriamiento global previsto para 2024, porque esa desaceleración afecta al crecimiento económico a nivel general". Algo que de forma directa incide en las Islas, un territorio que en buena parte se nutre de la demanda externa a través del mercado turístico. Ortega también apunta hacia las tensiones geopolíticas internacionales que, lejos de resolverse, se han intensificado, "y afectan ya a varias de las principales rutas comerciales internacionales de las que también se nutre Canarias”.

Con una inflación que sigue siendo importante -en febrero la subida de precios cerró en Canarias en un 3,1%, pero los alimentos continúan en el 6,3% después de meses al alza- no es de extrañar que la mayoría de los empresarios de las Islas reconozcan que ha sido uno de los principales hándicap para sus negocios. Cuatro de cada cinco admiten que el impacto en sus márgenes de beneficio ha sido alto o muy alto. Y es que la subida de precios es una espiral que afecta a todos. Las empresas han tenido que enfrentarse muchas veces a incrementos salvajes en las materias primas con las que elaboran sus productos, pero también en el transporte que hace llegar la mercancía a Canarias, en el combustible necesario para distribuirla dentro del Archipiélago o en la factura de la luz. Unos sobrecostes que se han visto obligados a repercutir en el precio final de sus productos, pero que en muchas ocasiones no ha podido compensar del todo el golpe en sus cuentas de resultados.

La inflación, una de las principales amenazas

De este modo, más de la mitad de los encuestados sitúan a la inflación como una de las principales amenazas para la economía española. Unas amenazas entre las que también nombran a la inseguridad jurídica, un 46%, la incertidumbre política, otro 41%, y las tensiones geopolíticas, que achaca el 33% de los empresarios canarios.

Y por eso, casi la mitad exige al Gobierno estatal medidas para controlar la subida de precios, ya que Canarias continúa estando entre las regiones más inflacionistas de España, teniendo en cuenta que de las medidas tomadas por el Ejecutivo de Pedro Sánchez en la anterior legislatura para mitigarla muy pocas podían aplicarse en el Archipiélago.

El Gobierno central y el Ejecutivo autonómico comparten responsabilidad en la aplicación de otra de las medidas reclamadas por el empresariado canario: la simplificación administrativa que solicitan más del 40% de los encuestados. A los dos les piden eficiencia en el gasto público y también mejorar la calidad de las instituciones, al Estatal, y de las infraestructuras, otro encargo para el regional.

Exigencias

Respecto a medidas concretas de política fiscal, los empresarios canarios son claros. El 78% exige incentivos a la inversión y a la mejora de la competitividad. Un 57% mayor seguridad jurídica y la mitad medidas fiscales para favorecer la liquidez de las empresas, algo que el informe apunta que no es descabellado, si se tiene en cuenta la preocupación respecto a cómo está afectando la inflación en la cuenta de resultados de muchas de ellas.

Enrique Núñez, socio responsable de Legal de KPMG en Canarias, resume que después de que el Archipiélago registrase el año pasado el mayor crecimiento en términos de Producto Interior Bruto (PIB) de toda España -3,8% según la AIRef, casi el doble que a nivel nacional por el decidido impulso de la actividad turística- "los empresarios de las Islas confían en el buen desempeño de sus compañías en este ejercicio". Para ello, otro de sus objetivos es "seguir impulsando de forma decidida su transformación digital y la mejora de las capacidades y competencias de sus equipos, dos aspectos clave para ganar competitividad en un entorno complejo como el actual”.

De hecho, siete de cada diez encuestados considera la transformación digital una prioridad estratégica para su empresa y un 68% tiene previsto invertir en esta área en 2024. Otro desafío para ellos es la atracción de talento que para un 57% de los directivos canarios es uno de los principales retos. Con este objetivo, las compañías deben diseñar estrategias para retener a sus plantillas así como para atraer a nuevos perfiles y ganar la batalla a la fuga del talento.

Por último, otro de los grandes desafíos de las empresas canarias es la implantación de la inteligencia artificial, una tecnología con múltiples aplicaciones. En este aspecto las compañías canarias parecen ir algo más rezagadas. El 33% de los directivos lo aplicará en sus negocios en los próximos meses y solo el 14% lo ha hecho ya con anterioridad.

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