Canarias pugna por contar

Las Islas, con los nacionalistas de CC y NC aspirantes a ser árbitros, afrontan la jornada electoral con la vista puesta en su futuro peso en las políticas estatales

La diferencia entre voto nulo, voto en blanco y abstención

PI STUDIO

Joaquín Anastasio

Joaquín Anastasio

Más de 37,4 millones de electores, de ellos 1,78 en Canarias, deciden hoy en las urnas el futuro gobierno de España, o al menos la composición del Congreso de los Diputados que luego tendrá que resolver la ecuación de las posibles mayorías parlamentarias que desemboquen en la investidura de alguno de los candidatos. Se trata de una consulta electoral histórica para renovar las Cortes Generales desde la recuperación de la democracia en el país porque nunca como en este 23-J los partidos o posibles coaliciones de gobierno, y sus respectivos aspirantes a la presidencia, han estado más alejadas entre sí y representando formulaciones ideológicas tan concretas dispares, al menos sobre el papel.

La polarización política, trasladada a la calle durante años y muy especialmente en la campaña electoral que se acaba de cerrar, queda finalmente resumida en esa doble oferta de alianzas contrapuestas entre el PSOE y Sumar por parte de la izquierda, con el socialista Pedro Sánchez como candidato a mantenerse en La Moncloa, y del PP y Vox como alianza fáctica de la derecha con el popular Alberto Núñez Feijóo como aspirante a representar el cambio. Los partidos nacionalistas y territoriales, por su lado, incluidos CC y NC desde Canarias, se presentan como aspirantes a árbitros si los resultados le dan la oportunidad. Esa polarización es la que en definitiva podría provocar, según las encuestas, un bloqueo parlamentario en la investidura como los que se produjeron en la XI y XIII legislaturas en 2016 y 2019, respectivamente, con la consiguiente ‘repetición’ de elecciones.

En directo

«Siempre que el voto de CC es importante, Canarias gana»

María Fernández

— Candidata CC

La campaña electoral, bronca y muy emocional, ha puesto sobre la mesa de una manera determinante la irreconciliable visión que ambos bloques presentan tanto sobre la situación real del país, como sobre el rumbo que debe tomar en los próximos cuatro años en el contexto de las incertidumbres económicas y geopolíticas que se presentan, y en el marco de una batalla ideológica internacional sobre el sentido de las democracias liberales de nuestro entorno. Son las primeras elecciones generales desde la pandemia sanitaria el 2020, que ha marcado la vida política, económica y social del país desde entonces, y desde el inicio hace año y medio de una guerra en Europa. Y se presentan en este sentido como la gran prueba de la pulsión ciudadana tanto respecto de las políticas reformistas que en este contexto ha practicado durante los últimos casi cuatro años, el gobierno de coalición de PSOE y Unidas Podemos con el apoyo parlamentario de PNV, ERC, Bildu y otras formaciones menores, a las que la izquierda parece que tendrá que volver a apelar para reeditar posible mayoría, así como respecto a la figura del propio Sánchez como presidente.

«Canarias jamás ha estado tan protegida como con el PSOE»

Dolores Corujo

— Candidata PSOE

El hecho de que por primera vez desde la Transición un partido de extrema derecha de inspiración neofranquista como Vox, negacionista del cambio climático y de la violencia machista, xenófobo, homófobo, antieuropeista y contrario a la España de las Autonomías, aparezca con posibilidades de entrar en el Gobierno de la nación, otorga a esta cita una importancia capital y es el elemento que ha marcado gran parte del debate de las últimas semanas. La gran mayoría de las encuestas han señalado con reiteración que pese a que Feijóo, en su estreno como candidato del PP, podría ganar con holgura las elecciones, en ningún caso con el suficiente margen como para evitar un pacto con la formación de Santiago Abascal, como ocurre ya en territorios como Comunidad Valenciana, Extremadura y Castilla y León, o en cientos de ayuntamientos tras las elecciones del 28-M.

«Nadie nos va a callar la boca para defender a esta tierra»

Luis Campos

— Candidato NC

Los resultados de esas elecciones autonómicas y locales, en las que el PSOE perdió muchas plazas de gobierno, fueron los que indujeron a Sánchez al adelanto de las generales, inicialmente previstas para diciembre, y han condicionado el tono de la campaña, desarrollada durante la conformación de los nuevos gobiernos regionales y municipales en la que se visualizó la alianza entre populares y Vox y la evidencia de que Feijóo pactará con Abascal si lo necesita para alcanzar La Moncloa. El líder popular ha intentado sin embargo desmarcarse de sus compañeros de bloque ideológico pese los mencionados acuerdos previos, y ha reclamado una mayoría suficiente para gobernar en solitario.

La pugna entre ambos bloques se ha apoyado sobre dos ideas fuerzas contrapuestas, la de la «derogación del sanchismo» en la que estratégicamente han coincidido los dos partidos de la derecha, y la del peligro de una «regresión» y el retroceso a una «España en blanco y negro» en cuanto a derechos sociales del que alerta la izquierda. Esta base argumental de fondo y claramente ideologizada por ambas partes ha impedido la discusión de las propuestas que cada parte hace para los grandes asuntos de la gobernanza. Feijóo ha logrado que los comicios se presenten ante un amplio sector del electorado como una consulta nacional contra la figura de Sánchez y obviando en muchos casos al PSOE como contrincante electoral, resaltando entre sus objetivos acabar con el riesgo de un nuevo gobierno que acoja como socios a los «comunistas» de Podemos (ahora integrados en Sumar, el proyecto de Yolanda Díaz), y como aliados parlamentarios a los «proetarras» de Bildu, y los independentistas catalanes de ERC. También han conseguido los candidatos del PP y Vox que la campaña no se haya centrado en la situación macroeconómica, sobre la que las estadísticas oficiales ofrecen datos positivos, y sí en la percepción de muchos ciudadanos de que hoy viven peor que hace cuatro años por la crisis inflacionaria del último año, de la que responsabilizan al Gobierno obviando las consecuencias de la pandemia y de la guerra en toda Europa. 

«Apostamos por formar una alternativa política a Sánchez»

Alberto Rodríguez

— Candidato Vox

Del otro lado, Sánchez y Díaz, que han realizado una campaña sin apenas referencias mutuas, han traslado a los electores que este 23-J España se juega «seguir avanzando» frente a la regresión social y en materia de derechos y libertades que supondría un gobierno de Feijóo y Abascal, y han buscado movilizar a esa izquierda que no acabó de responder el 28-M. De la capacidad que hayan tenido para convencerles de ese peligro, y también para seguir apoyando los avances económicos y sociales que aseguran ha conseguido el Gobierno progresista desde 2019 dependerán sus posibilidades reales de revalidar la fórmula, o al menos evitar la mayoría absoluta de la derecha.

La jornada electoral llega tras una campaña muy polarizada, con altibajos en la percepción por parte de cada uno de los partidos sobre su posición real en las encuestas y su estado de ánimo, en la que hasta se ha puesto en cuestión el voto por correo y se han deslizado acusaciones sobre su posible manipulación o supuesta incapacidad del Gobierno para garantizar el ejercicio del derecho por esa vía, por la que han optado más de 2,6 millones de electores al tratarse, también por primera vez, de unas lecciones en pleno verano y periodo vacacional. El cara a cara entre Sánchez y Feijóo, en el que el popular salió vencedor según la mayoría de observadores, y la negativa del candidato del PP a participar en otro debate a cuatro en la televisión pública (en el que finalmente solo estuvieron los candidatos de PSOE, Sumar y Vox) han sido elementos que también han inflamado el debate político. Las «mentiras» o «inexactitudes», según las versiones de unos u otros, de Feijóo sobre diversas materias en distintas intervenciones públicas, también han contribuido al tono bronco de la campaña.

«Somos la esperanza frente al miedo y el retroceso»

Noemí Santana

— Candidata Sumar

Canarias en el 23-J

Los más de 1,7 millones de canarios llamados a las urnas este domingo elegirán a sus 15 representantes en el Congreso y 11 en el Senado, de ellos ocho diputados por la provincia de Las Palmas y siete por la de Santa Cruz de Tenerife, además de tres senadores por Gran Canaria y Tenerife, y uno por Lanzarote, Fuerteventura, La Palma, La Gomera y El Hierro. Canarias afronta esta cita electoral con la vista puesta en el peso e influencia que pueda tener en las políticas estatales de la próxima legislatura, muy especialmente cuestiones como el respeto al REF, y afrontar problemas como el fenómeno migratorio procedente de África y las relaciones con Marruecos y otros países del entorno del continente africano, las inversiones del Estado en las Islas, la reforma de la financiación autonómica, las políticas de apoyo a la modernización del sector turístico, o las medidas para favorecer el empleo y de lucha contra la pobreza, entre otras. 

La presencia y participación de los líderes estatales en la campaña canaria no ha supuesto aclaración alguna respecto a su visión sobre a la mayoría de estos asuntos, dándose la circunstancia de que el propio Pedro Sánchez ha llegado a mencionar el descenso de la llegada de migrantes durante el año pasado por la ruta mediterránea sin mencionar la situación en la ruta canaria o las tragedias producidas en ella en los últimos meses, ni el repunte que se está produciendo este verano desde Senegal.

«El PP recortará el exceso de gasto público de Sánchez»

Jimena Delgado

— Candidata PP

Los partidos canarios han hecho una campaña electoral muy pegados a la realidad de las Islas, contrarrestando así el nulo eco que en este sentido se ha traslado a los programas electorales e intervenciones de sus respectivos líderes estatales. Solo los nacionalistas de CC y NC, que vuelven a ir por separado a este cita electoral, centran sus propuestas en la llamada agenda canaria con el Estado y a ese argumento se agarran para asegurar que su presencia en el Congreso es imprescindible para que Canarias no quede relegada en las políticas estatales. 

Los resultados de las elecciones del 28-M y el consiguiente cambio de gobierno en las Islas han condicionado una campaña en la que se han estrenado como cabezas de lista de los diferentes partidos hasta siete de los candidatos por cada una de las provincias. Lo hacen Dolores Corujo por el PSOE; Jimena Delgado por el PP; Luis Campos por NC; María Fernández por CC (en 2019 fue segunda en la coalición NC-CC tras el canarista Pedro Quevedo); y Noemí Santana por Sumar en el caso de la provincia de Las Palmas, así como el popular Juan Antonio Rojas y la nacionalista de CC Cristina Valido, que sustituye a la histórica Ana Oramas, por Santa Cruz de Tenerife. Repiten Alberto Rodríguez Almeida por Vox en la circunscripción oriental; y Héctor Gómez por el PSOE y Alberto Rodríguez Rodríguez por la coalición Sumar (en 2019 lo hizo en representación de Podemos) en la provincia occidental. 

La candidatura de Vox por Santa Cruz de Tenerife no se pudo registrar por la crisis interna de este partido en la configuración de la lista.

Escrutinio

Consulta en el especial informativo de La Provincia la última hora de estas elecciones generales del 23 de julio y conoce al momento las últimas noticias. Además, desde las 20:00 horas de hoy domingo puedes consultar los datos del escrutinio para el 23J. Tendrás desglosados en nuestro buscador los resultados de las Elecciones Generales 2023 con el número de escaños y votos que obtiene cada partido y podrás ver en directo quién ha ganado las elecciones.

Hoy, 23 de julio, están llamados a votar aquellos ciudadanos mayores de 18 años en las elecciones generales 2023. Sigue en directo toda la información del 23J en La Provincia, donde tendrás especial cobertura de lo que acontece en Canarias.

Resultados elecciones generales 23J

El 23 de julio puedes consultar los resultados de las elecciones generales 2023: