El Cabildo de Fuerteventura aprobó una iniciativa para recoger los rodolitos que se amontonan en el aeropuerto de Fuerteventura y devolverlos a su medio natural. La consejera María Saavedra (PP) afirmó que se amontonan cientos de kilos de rocas y coral en apenas horas en el aeropuerto majorero, por lo que reclamó una campaña de sensibilización y la señalización de las playas (especialmente la Playa de El Hierro y el litoral de Majanicho, en el municipio de La Oliva, conocidas como Pop Corn Bay).

"Resulta vergonzoso que cada día se requisen en el aeropuerto majorero botellas de rodolitos que se querían llevar los turistas cuando está prohibido. Se hace necesario activar un programa para devolverlos a la playa y que no terminen en la basura, relató Saavedra. También planteó instalar paneles informativos en las zonas de llegada y embarque del aeropuerto de Fuerteventura, advirtiendo de la prohibición de extracción de áridos, coral blanco en las playas y piedras volcánicas.

"Son playas únicas en la Macaronesia y no podemos permitir este expolio", subrayó la representante popular, para expresar a continuación su satisfacción porque el Cabildo de Fuerteventura evite que se lleven los rodolitos, la arena y también las piedras"

La isla de Fuerteventura posee una de las playas más curiosas del mundo, que se ha popularizado gracias al uso de las redes sociales y se ha rebautizado como Pop Corn Beach o Pop Corn Bay. Se trata de la playa situada entre Majanicho y El Cotillo y su arena tiene forma de palomitas de maíz, lo cual ha atraído en los últimos meses a cientos de turistas que no quieren abandonar la isla sin conocerla.

La consejera del PP agradeció que la iniciativa se aprobara por la vía de urgencia en la última sesión plenaria porque "es realmente una emergencia ambiental". En apenas dos días del pasado fin de semana se acumularon en el aeropuerto 11 kilos de rodolitos.

"Ahora hay que estar vigilantes para que el Cabildo cumpla y el Ayuntamiento de La Oliva señalice las playas para visibilizar la prohibición", indicó. Técnicos de Medio Ambiente devolverán a la playa este material que se acumula en botellas de plástico en el recinto aeroportuario.