Energías renovables

Arinaga ejecuta la primera renovación de aerogeneradores de todo el país

Endesa sustituirá nueve aparatos de más de veinte años de antigüedad que ya han cumplido su ciclo útil

Juanjo Jiménez

Juanjo Jiménez

El polígono de Arinaga está viviendo la primera ‘reforestación’ de un parque eólico que tiene lugar en todo el país, un ‘replantado’ de aerogeneradores que se produce tras cumplirse la vida útil de los primeros instalados en el fielato del siglo XXI, en el año 2001. Se trata del denominado Parque Eólico Carretera de Arinaga, en el que participan el Ayuntamiento de Agüimes y Enel Green Power España.

Podría parecer un simple proceso de quita y pon, pero no lo es. Y de hecho la firma que lo ejecuta, Endesa, que lo hace a través de los equipos de ingeniería, construcción y operación y mantenimiento de su filial de energías renovables, Enel Green Power España (EGPE), sigue de cerca su desarrollo para implementarlo en el resto del país, así como en Italia.

Lola Medina es directora de Proyectos de Construcción de la firma y en estos momentos tiene asignada esta tarea que comenzó en octubre de 2022, lo que da idea del complicado trajín previo que requiere un trabajo de estas dimensiones, en el que se trata de sustituir nueve antiguos elementos de 660 kilovatios de potencia por seis flamantes aerogeneradores Enercon E44, de 900 kilovatios, mucho más modernos y eficientes, con una cadencia más estable para verter la energía a la red eléctrica, lo que supone una inversión de diez millones de euros, y de paso reducir el número de elementos para una potencia similar a la anterior.

El proceso burocrático es casi más complejo que la propia tecnología implementada

Arinaga, según explica Medina, es una «coquita de oro» en recursos tanto eólicos como solares. En el término que la ocupa en estos momentos, explica que mientras en Aragón las mejores posiciones logran de 1.500 a 1.600 horas de producción al año, en el sureste grancanario este baremo asciende hasta las 3.800 horas anuales, «con lo que con unos aparatos de menos potencia nominal, dado esos recursos eólicos, facturas igual», subraya.

Pero para llegar a enchufar realmente el aparato a una línea de distribución de energía hay que realizar un enorme recorrido burocrático, que en caso de implantar por primera vez un aerogenerador en un solar puede durar más de cuatro años.

Así, antes de plantar el primer sello en un papel de la administración pública es la propia empresa la que encarga un estudio sostenido de al menos un año y medio sobre los recursos que ofrece una determinada zona, en la que se establece un cuadro sobre la incidencia de los vientos, o las horas de sol, las épocas de mayor rendimiento, o las posibles afecciones que la meteorología pudieran incidir en esa futura planta.

El siguiente paso tiene que ver con la disponibilidad de esos terrenos, de quien es la propiedad, si está en venta o en alquiler, una circunstancia ésta última que, según Medina, tiene una recurrente aceptación entre unos propietarios que, de disponer un erial improductivo, pasa a convertirse de repente en una entrada de efectivos de larga duración, no en balde los contratos se realizan por periodos de varias décadas.

Pero para llegar a ese punto hay que tender disponible un ‘enchufe’ cercano donde verter la energía, es decir una conexión a la red general cercana y con la capacidad suficiente para recibir la nueva potencia, amén de estar incluido en el registro de preasignación de retribución en Régimen Especial. A partir de ahí se inicia una caterva de documentación que pasa por la autorización administrativa, el diseño de la instalación, con separatas de documentación para cada una de las administraciones afectadas, el imprescindible informe de impacto ambiental, -que es el más exigente de todos, según la directora de proyectos-, y la documentación que acredite la capacidad legal, técnica y económica.

Los nuevos sistemas permitirán reducir el número de molinos sin reducir la potencia asignada

Pero aún queda el plazo de información pública, y una vez terminado ya sea el plante o el trasplante, la solicitud de puesta en servicio, el certificado de obras y hasta la disposición de un manual de instrucciones.

El siguiente reto, en el caso de esta sustitución pionera en Arinaga, es la retirada de los viejos aparatos, que ahora se encuentran almacenados esperando su futuro como repuestos, así como el reajardinamiento del entorno, con la retirada y trasplante de árboles y palmeras dentro del propio Polígono Industrial de Arinaga.

El resto es ingeniería pura, con una gran cimentación que ya se encuentra finalizada, ejecutada por medio de unas grandes jaulas de pernos sobre los que se erigirán, en breve, los nuevos seis aerogeneradores.

[object Object]

La firma Green Power España asegura que ratifica su apuesta por las energías renovables y la transición energética en las islas Canarias, «no sólo desarrollando nuevos proyectos de generación eólica y fotovoltaica, sino renovando su flota existente a través de la repotenciación de éste y otros parques eólicos», en referencia a la obra de Arinaga. Según afirma esto es una muestra de su «capacidad de liderazgo en el sector y compromiso con el territorio, con el fin de contribuir de forma importante a lograr entre todos un mundo más limpio y sostenible». Según sus números, la división renovable de Endesa, Enel Green Power España, conectó el pasado año 626,65 megavatios de nueva capacidad renovable a la red eléctrica en España procedente de 12 instalaciones solares, con un total de 499,5 megavatios; una eólica, de 123,4; y dos hidráulicas, de 3,6 megavatios. Gracias a esta nueva capacidad Endesa gestiona actualmente, a través de Enel Green Power , 8.390 megavatios de capacidad renovable instalada en España, que incluyen 4.746 en centrales hidráulicas; 2.546 en parques eólicos; y otras 1.098 en plantas solares. | LP/DLP

Suscríbete para seguir leyendo