El altercado en una guagua en Lanzarote con más de una quincena de menores acaba con el vehículo destrozado

La situación obligó a intervenir a la Policía Local de Tinajo en Mancha Blanca, que instó a los chicos, usuarios del centro de acogida de migrantes de La Santa, a bajar del vehículo

Altercado con menores migrantes en una guagua en la línea Arrecife-La Santa

C. P. L.

Los guagüeros del servicio público de transporte interurbano de Lanzarote no ganan para disgustos. Al intento de agresión por parte de un pasajero a un conductor a mediados del pasado mes de enero en una guagua que cubría con retraso el trayecto en Puerto del Carmen (Tías), se sumó días después un altercado por parte de jóvenes migrantes menores de edad en el vehículo de la Línea 16 que hacía la ruta entre Arrecife y La Santa (Tinajo).

Los hechos ocurrieron en la tarde del pasado 28 de enero, según relata uno de los cuatro conductores (dos mujeres y dos hombres) que habitualmente realiza el trayecto y que prefiere mantenerse en el anonimato.

El mal comportamiento de más de una quincena de chicos, internos del centro de acogida de menores migrantes no acompañados ubicado en el pueblo de La Santa, dependiente del Cabildo de Lanzarote, obligó a intervenir a la Policía Local de Tinajo, cuyos agentes instaron a bajar de la guagua a más de una docena de ellos en la parada de Mancha Blanca por el escándalo que estaban armando durante buena parte del recorrido molestando al resto de pasajeros.

Y no solo eso. El interior del habitáculo acabó con los asientos y una mampara rotos, suciedad, comida y ropa en las butacas y en el pasillo, según una persona que presenció los hechos.

"Se alborotaron demasiado"

Los jóvenes, habituales en esa ruta, se habían subido en Arrecife y ese día “se alborotaron demasiado”. Durante el camino “empezaron a cantar y a tocar las palmas y a molestar a otras personas”, por lo que el mal ambiente fue aumentando a medida que avanzaba el itinerario de la Línea 16. Cuando el conductor ya no pudo más avisó a la Policía Local de Tinajo al llegar a la parada del pueblo de Tiagua (Teguise) para que se presentara en Mancha Blanca, como así ocurrió.

Una vez allí, varios policías locales subieron a bordo y se dirigieron a los menores para que cesaran su actitud y se bajaran del autobús. “Incluso llegaron a reírse de los policías”, relata un testigo.

El interior del habitáculo acabó con los asientos y una mampara rotos, suciedad, comida y ropa en las butacas y en el pasillo

Fueron monitores del albergue de La Santa los que recogieron a los migrantes y los llevaron de vuelta al centro.

“No estamos en contra de que los menores migrantes cojan la guagua, porque tienen derecho a hacerlo como el resto de ciudadanos. Lo que no nos gusta es cómo se comportan algunos de ellos sin respetar al resto del pasaje”, señalaron los conductores. Añaden que hay usuarios que para evitar molestias han decidido no volver a usar ese transporte público, en el que viajan desde adolescentes a personas mayores, además de un niño con autismo que “lo pasa muy mal cuando escucha los gritos”.

Los conductores trasladaron a los monitores lo que había pasado con el fin de que “los instaran a corregir su comportamiento para que no volviera a ocurrir”.

Problemas en otras líneas

No es la primera vez que se producen situaciones incómodas con los menores migrantes, aunque no siempre del mismo calado como las que tuvieron lugar el pasado enero. “Desde antes de la pandemia estamos con ese problema y nos vemos indefensos. Pedimos más apoyo a la empresa, que no nos contesta a las cartas que le enviamos y también al Cabildo”. Fuentes de Intercity Bus, concesionaria del servicio en Lanzarote, indicaron que “no nos ha llegado ninguna reclamación o informe de conductor de altercados en las guaguas”.

Los conductores piden cámaras de seguridad en las guaguas y aumentar el número de chóferes para aumentar las frecuencias en algunos trayectos

Entre las peticiones que, según los conductores, han hecho llegar a la empresa están las de poner cámaras de seguridad en las guaguas y aumentar el número de chóferes para poder ofrecer más frecuencias en determinados trayectos, como los que van a las zonas turísticas (Costa Teguise, Puerto del Carmen y Playa Blanca).

Los retrasos y la falta de asientos por el incremento de la demanda a raíz de la gratuidad en el transporte, genera malestar entre los usuarios, algunos de los cuales se dirigen de malos modos a los conductores. Fue lo que sucedió en Puerto del Carmen y también en la Línea 7 (Arrecife-Máguez), donde uno de los guagüeros “está de baja médica tras ponerse agresivo con él un pasajero”, aseveró Ricardo Hernández, enlace sindical de CCOO en Arrecife Bus y presidente del Comité de Salud Laboral de la citada empresa, a la que pertenece Intercity Bus.

Con el fin de hacer frente a los problemas que genera el aumento de demanda de transporte público, el Cabildo de Lanzarote ya ha anunciado que va a adoptar diversas medidas, entre ellas el establecimiento de una nueva línea entre Arrecife y Playa Blanca así como el aumento de frecuencias.