Los actos vandálicos continuaron durante la madrugada de ayer en la capital grancanaria, con la quema de 12 contenedores en los barrios de Schamann, Arenales y Zárate, en este último con dos motos carbonizadas. En total, son unos 45 contenedores los que han sido quemados desde el comienzo de este año.

Además, al menos siete coches, que estaban aparcados junto a algunos de estos contenedores, se vieron afectados en menor o mayor grado por las llamas, especialmente, en El Batán. Otros de los barrios que han sido víctimas de estas acciones desde principios de año son San José, San Cristóbal, Escaleritas, Los Hoyos y Parque Central.

Según la Concejalía de Desarrollo Sostenible del Ayuntamiento de Las Palmas de Gran Canaria, cada contenedor de basura orgánica cuesta 600 euros y de selectiva de papeles, plástico o vidrio, 900 euros, por lo que sólo en los primeros 15 días de enero el Consistorio ha tenido que desembolsar unos 30.000 euros.

Inmaculada Medina, concejala de esta área, señala que los culpables de estas oleadas de actos vandálicos son "dos o tres gamberros" y asegura que la Policía Nacional ha aumentado la vigilancia en diferentes barrios de la capital grancanaria y que cuenta con la colaboración de la Policía Local. La edila puntualiza que no hay que culpabilizar a los vecinos porque "la mayoría de los ciudadanos son gente civilizada".

Asimismo apunta que no hay que "sembrar alarma en la población", ya que se trata de "casos aislados" que "lo único que consiguen es perjudicar a los vecinos doblemente porque generan incendios en los coches y porque los contenedores se pagan con el dinero del contribuyente".

DENUNCIAS. Desde Desarrollo Sostenible señalan que la Policía Nacional continúa recogiendo las denuncias de los incendios de contenedores y está llevando adelante todas las diligencias pertinentes. Aun así, Medina pidió la colaboración de los vecinos "que se mantengan expectantes por si ven a alguien, detectarlo, y llamar a la policía para evitar que estos actos sigan sucediendo".

A pesar de que algunos vecinos, como los del barrio de El Batán, sospechan de quiénes son los autores de estos actos, el Ayuntamiento todavía no tiene constancia de que se haya detenido a nadie.