El Partido Socialista y Nueva Canarias (NC) protagonizaron ayer el primer gran desencuentro entre las dos formaciones que gobiernan en el Cabildo y varios municipios grancanarios, a cuenta de las quejas del Ayuntamiento de Las Palmas de Gran Canaria por la negativa nacionalista a financiar Guaguas, lo que, a juicio de los socialistas, les obliga a vender el 49% de las acciones de la empresa. Este proceso provocó la crítica del presidente local de NC, Francis Candil, que el jueves acusó al alcalde Jerónimo Saavedra y a su gobierno de incompetencia.

Fue la gota que colmó el vaso de la paciencia del veterano político tras los desplantes del vicepresidente del Cabildo y líder de NC, Román Rodríguez, que ha reiterado en numerosas ocasiones su negativa a entrar en el accionariado de Guaguas para evitar su colapso económico. "Los socialistas en el Cabildo tenemos a un aliado peligroso", afirmó ayer en referencia a NC, Jerónimo Saavedra.

El alcalde se mostró irritado en una entrevista en la Cadena SER, censurando a NC y en especial a Candil, que fue recolocado como asesor en el Cabildo tras no obtener el acta de concejal en la capital, por sus ataques al gobierno municipal socialista.

SIN CONCEJAL. "Por lo visto la única institución de la Isla que es objeto de crítica por NC es allí justo donde el pueblo no les dio acceso al puesto de concejal. Y además que lo haga una persona que está pagada por los presupuestos del Cabildo y no sabemos qué hace y si su única función es criticar al Ayuntamiento de Las Palmas de Gran Canaria. Lo digo porque estoy harto, y siendo sincero, ya está bien", señaló Saavedra.

El alcalde no ocultó que NC parece tener especial interés en favorecer la implantación del tren en detrimento de Guaguas. "A ver por qué es siempre ese partido el que se opone a que entre capital público en Guaguas", dijo, "mi partido no lleva ninguna resolución a sus congresos hablando del tren. ¿Cuántos millones cree que va a implicar ese proyecto? ¿Se cree que se lo va a dar todo Madrid? En NC deben ser más realistas y considerados a la hora de tener como único enemigo al Ayuntamiento".