Las Palmas de Gran Canaria gana más de 2.000 empleos mientras sigue perdiendo población

Lejos de recuperarse, Las Palmas de Gran Canaria sigue perdiendo población y se aleja cada vez más del umbral de 381.223 habitantes que tenía antes de la pandemia de la Covid-19. En 2023, 720 vecinos dejaron la ciudad para optar por otras zonas menos bulliciosas y más baratas para vivir. Sin embargo, el descenso de la población viene aplacado por el tirón que ha dado el empleo en los últimos 12 meses, con 2.692 parados menos que en 2022.

El padrón del municipio publicado por el Instituto Nacional de Estadística (INE) arroja un balance de 378.027 habitantes en 2023, unos datos que frenan la recuperación que se esperaba tras la caída poblacional que introdujo la crisis sanitaria y económica. Las Palmas de Gran Canaria fue el municipio canario que más residentes perdió al comienzo de la pandemia, con la marcha de 2.548 vecinos. Sin embargo, al año siguiente volvieron 122 personas y todo apuntaba a que la tendencia seguiría siendo positiva este año.

El Norte alcanza su máximo histórico de población y rompe el éxodo rural

Pero la pérdida de un 0,2% de la población de la capital con respecto al año pasado sigue agrandando la brecha. Hasta 2020, la ciudad venía registrando un incremento cada año, que le hizo superar los 380.000 habitantes tras un lustro por debajo de esa cifra. El descenso empezó por las repercusiones que tuvieron las restricciones sanitarias para el sector turístico, las trabas para la movilidad hacia otros países, así como las dificultades para encontrar trabajo en esas circunstancias. En estos momentos, para volver a las cifras prepandemia es necesario que se inscriban 3.196 personas en el padrón municipal.

El padrón municipal de 2023 muestra que 720 vecinos han dejado la urbe en los últimos meses

Lo habitual es que las urbes presenten varias etapas. Primero registran un aumento de la población que llega de los núcleos rurales en busca de empleos bien remunerados. Esa fase inicial lleva a que se establezcan barrios periféricos para acoger a todos los habitantes, pero pasado un tiempo tiende a estabilizarse y mantenerse con pocos vaivenes. 

El Banco Mundial advierte del desafío que supuso la Covid-19 para los núcleos urbanos y para sus habitantes y cómo las medidas adoptadas para controlar la propagación del virus tuvieron "efectos desproporcionados" en las personas pobres, marginadas y vulnerables de la sociedad. El organismo señala que este episodio reveló fallas en la estructura económica de las ciudades y en la preparación para afrontar crisis de este tipo, en especial "debido al estado de sus sistemas de salud pública y de prestación de servicios". 

En Las Palmas de Gran Canaria se suma la dificultad para acceder a la vivienda, con un mercado del alquiler que se ha mantenido al alza estos últimos meses. Según datos de la plataforma Idealista, los alquileres tocaron techo en agosto, alcanzando su máximo histórico con precios de 11,8 euros el metro cuadrado. Esto, traducido en un piso de 80 metros, implica cuotas cercanas a los 950 euros. 

Descenso del paro

El año más positivo para la capital fue en 2011, cuando alcanzó la cifra de 283.343 habitantes, pero apenas tres años después empezó a descender por las consecuencias de la crisis inmobiliaria. Antes de eso se había mantenido cinco años al alza, ganando entre 2007 y 2008 hasta 3.920 vecinos.

Mientras tanto, la ciudad registra datos positivos en materia de empleo. El paro descendió en diciembre de 2023 un 7,4% con respecto al mismo mes del año anterior y un 1,6% en comparación con el mes de noviembre, de forma que 552 personas consiguieron encontrar trabajo, según los datos del Servicio Público de Empleo Estatal (SEPE). Esto favoreció especialmente a las personas de entre 25 y 44 años, que vivieron un incremento del empleo del 10,6% con respecto a 2022, seguidos de los menores de 25, con un aumento del 9,8% interanual, y de los mayores de 45, con un 5,4% más. 

Al contrario que con el número de habitantes, el empleo sigue una tendencia al alza en los últimos tres años. En diciembre de 2020 había 7.082 personas más en el paro con respecto al año anterior, pero esto se revirtió en 2021 con 7.955 nuevos trabajadores. Desde entonces, otras 4.504 personas han conseguido salir del paro en la ciudad.

El alza del precio del alquiler es una de las principales trabas que enfrentan los residentes

Los sectores que han vivido un mayor crecimiento en 2023 han sido la industria (con un 8,9% más de trabajadores), la hostelería (que crece un 7,85%) y el comercio (con un 7,73% más). Por otro lado, el empleo en la construcción ha mejorado un 6,74%, en la agricultura un 3,95% y en el resto de servicios una media de 6,51%. 

Las personas con estudios universitarios lograron un incremento de contratos laborales del 9,1% si se compara con las cifras de 2022, seguidas de aquellos que cuentan con la educación secundaria, que encontraron un 8,3% más de empleos que el año anterior. Además, los que cuentan con formación profesional lograron una mejora de un 7,3% y los que tienen la educación primaria de un 6,3%.

Las mujeres vivieron un mayor incremento del empleo con respecto a 2022 (8,4%), que los hombres (6%). Sin embargo, en el paro sigue habiendo más presencia femenina que masculina, pues hay 15.486 hombres desempleados frente a 21.025 mujeres. Además, ellas ocupaban más contratos temporales en diciembre de 2023 que ellos, siendo 4.351 empleos de este tipo frente a 3.611.

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