Anabel Pantoja no ha aguantado más y ha estallado en su perfil oficial de Instagram ante la presión mediática de la que está siendo víctima desde que anunció su ruptura con Yulen Pereira. a sevillana afincada en Canarias ha publicado una carta abierta en la mencionada red social en la que se desahoga como nunca sobre lo que le esta ocurriendo en su día a día.

Este crucial momento en la vida de la 'Pantojita de Canarias' llega después de que se haya refugiado en Gran Canaria y en sus mejores amigos tras el fin de su relación con el esgrimista madrileño. Además, la hispalense disfrutó de los Carnavales de Maspalomas junto a Belén Esteban y también se le pudo ver disfrutando de la música del artista grancanario Quevedo en el Gran Canaria para poner tierra de por medio en un momento tan convulso.

Sin embargo, el momento que ha tumbado a la ex colaboradora de Sálvame tiene que ver con la filtración de una información relacionada con una supuesta relación que la joven habría empezado junto a un joven canario. Según la propia Anabel, el hecho de que se le esté cuestionando todo lo que hace o dice, ha hecho que haya tocado fondo y así se lo ha hecho saber a los casi 2 millones de seguidores que acumula en redes sociales.

"¡QUIERO VIVIR SIN SER JUZGADA!"

Completamente rota y con dos fotografías en las que la joven sale llorando para mostrar la realidad de su situación actual, Anabel Pantoja se ha desnudado como nunca con su comunidad virtual y ha hecho un desgarrador relato sobre cómo se encuentra.

"Todo lo que llevo dentro no quiero dramatizar, son Mis cosas, Mis problemas, como le puede pasar a la mayoría de personas. Cuando decides callar, seguir adelante, intentar incluso disfrutar y por supuesto seguir, vivir sin tener que tener que justificarte, explicarte, dar razones o responder a las preguntas que te hacen por la calle llega a ser una puñetera pesadilla", escribe la joven.

"Me siento como una absoluta delincuente, he tenido y sigo soportando a día de hoy que se me juzgue tanto en redes como en programas, lo mala hija que soy, que si no trabajo o a que me dedico, cuando llevo 15 años sin parar, si he sido mala esposa, por querer ser feliz y no hacer daño, si voy exigiendo o siendo borde por querer respeto en un funeral de mi padre, donde curiosamente la Guardia Civil iba a buscarme, otra locura de la que se me acusó y nadie me pidió perdón", confiesa.

Sobre su situación personal y sentimental, Anabel es clara. "Seguimos por mi actual situación, si estoy soltera, y sigo viviendo es que tengo que estar con el primero que cuenten o digan, pero POR COJONES, cuando ahora que lo pienso, estoy en mi PUÑETERO DERECHO. Pero claro soy una chica sueltecita por andar por ahí … un escándalo, si lo hiciera un chico ni se hablaría 3 horas todas las tardes. En resumidas cuentas, no hablo, no acuso, no cobro, no daño, no comento nada de NADIE", explica para plantearse una cuestión. "¿Puede ser que dé un paso, vaya a trabajar, me tome una cerveza, me dé un abrazo, salga de fiesta, haga deporte, me dé un beso, vaya a los carnavales con amigos , suba una puñetera canción a Instagram, me vaya de viaje y no sea una puñetera tragedia?".

Finalmente, la joven cierra su testimonio con una petición: que la dejen estar tranquila y que dejen de juzgarla. "El nudo en el estómago y en la garganta de la impotencia no se llama ANSIEDAD, se llama, QUIERO VIVIR SIN SER JUZGADA", zanja.