La Agencia Estatal de Meteorología ha pintado casi todo el mapa de Canarias de color amarillo, por temperaturas de hasta 34 grados hasta el próximo domingo, unas máximas de la que solo escaparán la banda norte del Archipiélago y la isla de La Palma en peso.

Tanto en Gran Canaria como en las demás islas los termómetros se pondrán de lo más veraniegos en el este, oeste y sur, pero en medianías y cumbres ya ayer mismo se registraron picos de hasta tres grados por encima de la máxima prevista, como en Tejeda, que llegó a marcar 36,7 grados en el centro del pueblo, ofreciendo el día más caluroso registrado este verano.

La clasificatoria de ayer tenía a Ingenio en segundo lugar, con solo dos décimas por debajo de los 30, y Maspalomas en tercera posición, con 29,2 grados.

Así estaba el panorama a media tarde justo cuando el Observatorio de Hidratación y Salud (OHS) lanzaba una advertencia: que el 84 por ciento de los canarios no bebe -agua- ni con altas temperaturas.

Esto a pesar de que la deshidratación es una de las principales causas del vahído y la pérdida del tino, con mareos, dolores de cabeza y hasta vómitos. La misma información del Observatorio asegura que el isleño ingiere menos de tres litros -de agua- al día. Y que cuando lo hace es cuando nota la sed, algo tarde, según los expertos, porque la sensación llega cuando ya está en marcha la deshidratación.

Afinando aún más, 32 de cada cien bañistas de la tierra no se llevan ni una botella de agua a la playa, y claro, 27 de cada cien confiesa haberse deshidratado.