La causa exacta de la muerte de Olivia, la mayor de las dos niñas desaparecidas en Tenerife junto a su padre, Tomás Gimeno, se conocerá en unas dos semanas. Esa es la información que ha dado a conocer el Tribunal Superior de Justicia de Canarias (TSJC) a raíz de los primeros análisis de los restos biológicos del cadáver hallado el pasado jueves por el buque oceanográfico 'Angeles Alvariño'.
Según ha dado a conocer el TSJC en la mañana de este lunes, el Instituto Nacional de Toxicología y Ciencias Forenses (INTCF) en su sede de La Laguna estima que los primeros resultados de las pruebas referentes al análisis de los restos biológicos de Olivia (resultados químicos) no estarán disponibles hasta dentro de, al menos, dos semanas.
Tomás Gimeno, padre de las niñas Anna y Olivia, de tan sólo uno y seis años, presuntamente dio muerte a sus hijas en su casa de Igueste de Candelaria, envolviéndolas luego en toallas e introduciéndolas en bolsas de basura que lanzó al mar sujetas a una cadena, un cabo y un ancla. Así lo recoge el auto de la magistrada del Juzgado de Primera Instancia e Instrucción Número 3 de Güímar, que se conoció el pasado sábado, y que también revela que Olivia, cuyo cuerpo fue encontrado el pasado jueves, falleció de muerte violenta, de tipo homicida, como consecuencia de un edema agudo de pulmón.
Mientras, el paradero de Anna, hermana de Olivia, y el de Tomás Gimeno sigue sin conocerse. Este lunes, 14 de junio, el buque Ángeles Alvariño podría zarpar del Puerto de Santa Cruz de Tenerife tras haber reparado la avería que paralizó las labores de búsqueda.
