Salvamento Marítimo rescató anoche a 117 millas de Gran Canaria a los 105 ocupantes de un cayuco que zarpó el pasado 14 de noviembre de un punto de la costa de Senegal o Gambia. Los inmigrantes, de origen subsahariano, se encontraban en buen estado de salud y fueron trasladados hasta el muelle de Arguineguín, donde estaba prevista su llegada a las cuatro de esta madrugada.

La barcaza llevaba en alta mar desde hacía ocho días. Sin embargo, el organismo de rescate estatal no tuvo conocimiento de su salida hasta el pasado lunes, cuando comenzó a rastrear el sur del Archipiélago para tratar de localizar a las 80 personas que, en principio, se pensaba que iban en su interior.

El avión Sasemar 103, con base en el aeropuerto de Gran Canaria, avistó sobre las 13.30 horas el cayuco. Los inmigrantes, al percatarse de la presencia de la aeronave, comenzaron a hacerle gestos para fueran vistos. Salvamento Marítimo movilizó entonces a dos embarcaciones, la Salvamar Menkalinan y la Guardamar Talía.

Asimismo, se dio orden al buque North Sea Atlantic, que navegaba por la zona para que se posicionara junto al cayuco y se solicitó al Ejército del Aire que desplazara un avión del SAR (Search and Rescue) del 802 Escuadrón con base en Gando para que continuara la vigilancia después de que el Sasemar 103 abandonara el lugar.

La Menkalinan procedió a rescatarlos sobre las 20.00 horas. Por su parte, la Talía proporcionó agua y comida a los 105 ocupantes. La Cruz Roja preparó anoche un dispositivo en Arguineguín para atender a los inmigrantes a su llegada, que se esperaba sobre las cuatro de la madrugada.

La actividad migratoria desde la región subsahariana se ha visto reducido considerablemente durante los últimos años hasta casi desaparecer después de que en 2006 se alcanzara una cifra récord con 30.554 personas, según datos recogidos por Cruz Roja. En cambio, el pasado 16 de octubre una de estas embarcaciones fue avistada cerca de Pasito Blanco con un total de 95 personas a bordo dos años después de que lo hiciera la última. Los ocupantes del cayuco declararon que zarparon de Senegal. Agentes especializados en inmigración, por su parte, apuntaron que la principal hipótesis era que habían partido de Marruecos dado al buen estado de salud que presentaban todos los ocupantes.