Muere un niño de 11 años por meningitis

El meningococo se transmite de forma directa de persona a persona por secreciones de la vía respiratoria y tras un contacto estrecho y prolongado

Una ambulancia, en una imagen de archivo

Una ambulancia, en una imagen de archivo / http://www.scientificanimations.com/wiki-images/

Un niño de 11 años ha fallecido por meningitis en la localidad valenciana de Rocafort, según ha constatado la Dirección General de Salud Pública de la Conselleria de Sanidad.

Desde sus servicios centrales de Epidemiología, y a través del Centro de Salud Pública de Valencia, se ha activado el protocolo habitual en estos casos y se está investigando y localizando a los contactos directos del niño para realizar las correspondientes encuestas epidemiológicas que determinen los casos que requieren administración de profilaxis.

Paralelamente, desde Salud Pública se ha enviado una muestra de la bacteria para que se serotipe al Centro Nacional de Microbiología con la finalidad de completar el estudio microbiológico en el marco del Sistema d Vigilancia Epidemiológica, explican a Europa Press fuentes sanitarias.

Por su parte, el Ayuntamiento de Rocafort ha mostrado, en un mensaje en redes sociales, "su más sentido pésame a los familiares y amigos de Álex, vecino de la localidad fallecido ayer a los 11 años de edad".

Según precisan fuentes sanitarias, el meningococo se transmite de forma directa de persona a persona por secreciones de la vía respiratoria y tras un contacto estrecho y prolongado. Por lo tanto lo primero es identificar el periodo de transmisibilidad del caso y a través de la familia y contactos directos identificar qué personas (adultos y niños) han podido mantener un contacto estrecho con el paciente.

En cuanto a contacto estrecho, el protocolo especifica que se refiere a personas que vivan en el mismo domicilio o hayan dormido en la misma habitación en los 10 días anteriores al diagnóstico; y personas expuestas a las secreciones nasofaríngeas del enfermo en los días precedentes a su hospitalización, entre ellas compañeros habituales de juego.

Una vez valorado quienes han mantenido un contacto estrecho con el caso, se les prescribe proxilaxis. En el caso de los colegios se hace una reunión con los padres de los niños considerados contactos, se les explica la situación y se prescribe la quimioprofilaxis a las personas que se consideren en riesgo.