Un desprendimiento ocurrido esta mañana en la carretera del Centro de Gran Canaria, a la la altura de la entrada del pueblo de Santa Brígida desde Las Palmas de Gran Canaria, generó importantes retenciones al permanecer la vía más de dos horas cerrada al tráfico.

El derrumbe ocurrió en la conocida como curva del molino en torno a las siete de la mañana debido a las intensas lluvias caídas durante los últimos días en el municipio satauteño. Al lugar acudieron Policía Local y Guardia Civil, que decidieron cortar la circulación.

Los servicios de emergencias, esta mañana, en la curva del molino donde se produjo el desprendimiento.

Los agentes comenzaron a ordenar el tráfico y desviarlo por otras vías secundarias, generándose retenciones kilométricas en ambos sentidos de la vía debido a que era hora punta de desplazamientos a los puestos de trabajo y colegio.

Los trabajos se agilizaron para retirar la tierra que invadió la tierra y prácticamente dos horas y media después del incidente se reabrió la vía GC-15 al tráfico, que hizo que se normalizara la circulación, según apuntaron las fuentes de los equipos de seguridad que intervinieron en el lugar.