Había que verle la cara a Quique Setién en la sala de prensa del Estadio de El Madrigal. El cántabro, caliente por el error arbitral que le costó un punto a su equipo cuando el partido agonizaba, criticó la actuación arbitral, empezando por el penalti señalado a Roque Mesa. "Ya nos pasó algo así en Sevilla. M e queda la duda de saber qué hubiera pasado de ser al revés, si el árbitro hubiera tenido huevos de pitarlo", reveló Setién al término del choque ante el Villarreal.

Todo rematado con la falta no señalada sobre Montoro de Bakambu previa al segundo gol del Villlarreal. "La jugada es clamorosa, de escándalo estando ahí al lado [...] Es una lucha que está perdida; una pena porque supongo que estas cosas no tienen remedio", explicó Setién sobre el criterio dispar que utilizó el oscense Jaime Latre en el partido de ayer.

Setién descartó que esas dos acciones que marcaron el partido se deban a que a la UD no le tengan respeto, aunque sí le falta un "aura" como la que tiene el Villarreal. "Los árbitros tienen una incidencia a la hora de señalar faltas en función del equipo, ya pasó en Sevilla", recordó el entrenador montañés.

Por ello y por el juego que demostró ayer la UD Las Palmas, Setién cree "injunto" el resultado con el que regresó a Gran Canaria. "Quizá lo más lógico hubiera sido el empate, porque nos vamos con una derrota al final después de haber hecho un gran partido", puntualizó el técnico.

A vueltas on los méritos realizados por uno y otro equipo, Setién opinó que el partido de ayer "no nos lo ganó el Villarreal". "Al final, el rival tiene jugadores muy buenos y no hemos podido desahogarnos un poco más. No hemos podido salir de ahí, porque además de las sensaciones lo importante es sacar los partidos adelante", añadió.

Porque futbolísticamente, Setién también hizo autocrítica. "Por momentos nos replegamos demasiado porque la calidad del rival que tenemos enfrente es enome y hay que darse cuenta de eso también. Para equipos como nosotros, venir a un campo como éste es muy difícil. Hemos pasado dificultades", sentenció.

Además de ello, Setién recordó algunas de las acciones de las que dispuso su equipo durante la segunda mitad para hacer goles al contragolpe. "Tuvimos acciones donde pudimos haberles hecho más daño", manifestó Quique Setién, en referencia a las cabalgadas de Dani Castellano en la segunda mitad y a oportunidades como la de Boateng en la primera mitad.

El cántabro echó de menos velocidad en su equipo para formar contrataques más peligrosos. "No teníamos demasiada capacidad para cambiar muchas cosas en el banquillo. Conozco a mis jugadores. Tengo de precisión y toque, pero me falta gente de velocidad, que vayan al espacio", recalcó. Al técnico amarillo no le inquieta demasiado que Las Palmas, que lleva cinco jornadas sin ganar, no haya conseguido sacar los tres puntos. "Salimos tratando de hacerlo", añadió.