Martín Mantovani, el zaguero que logró el tanto más increíble del verano, disecciona el inminente debut ante el Huesca -club que defendió con nueve partidos- y el fenómeno Pedri. "Destaco que te presta atención (...) Más allá de lo futbolístico, de que le pega con las dos [piernas], de que se para bien, se adecúa...Tiene cosas especiales pero sobre todo es una esponja". Realza que tienen "una deuda con la afición" tras el caótico 2018-19.

El argentino califica de "partido especial" su reencuentro con el Huesca. "Compartí vestuario los tres últimos meses.Me dejó la enseñanza de nunca rendirse".

La fase de carga de pretemporada comenzó el 8 de julio y se extendió 35 fechas. Mantovani ha podido lucir su arista competitiva. El regreso del guerrero. "A nivel personal ha sido una buena pretemporada. En la pasada, sufrí una rotura". Sobre la gran parálisis en la operación salida y el desajuste salarial, que provoca que no se puedan inscribir a Álex Suárez, Kirian o Drolé, pone en valor el compromiso de la caseta.

"Que se escuchen y digan cosas no nos ha afectado. Destaco que el vestuario es cada vez más fuerte. Más allá de las idas, vueltas, runrunes...La gente estuvo al margen. Cosa que no han pasado en otros clubes, dónde se han vivido situaciones delicadas". ¿Cómo se puede recuperar la sonrisa del Gran Canaria? Con coraje. "Tenemos una deuda, el año pasado se puso un objetivo y no se cumplió. El equipo está confiado pero debemos ir 'de poquito a poquito'. La gente debe tener paciencia, tendrán un equipo entregado".

Aplaude la presencia de canteranos."Te meten ilusión (...) No solo valen los nombres. Como compañero, quiero más a mi lado a alguien que se parta la cabeza por mí". Quiere a un Pedri liberado: "La responsabilidad hay que dársela a otros, tiene que disfrutar". Bendice la llegada de Jonathan Viera como cedido. "Es un gran jugador, a los mejores siempre hay que tenerlos a tu lado".