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El reportaje / La resaca de la 22ª jornada

Una racha de 'playoff'

La UD suma 14 puntos de 18 posibles en las últimas seis jornadas, se sitúa en el sexto lugar de la tabla y es el mejor de la categoría en ese periodo - El equipo alcanza un alto grado de fiabilidad

Formación inicial de la UD frente al Fuenlabrada. Detrás, y de izquierda a derecha: Valles, Mantovani, Benito, Aythami, Narváez y Maikel. Delante: Curbelo, Pedri, Fabio, Javi Castellano y De la Bella. LOF

Dos partidos, dos puntos, un puesto más arriba. La UD Las Palmas es de playoff. Acaba la jornada en el sexto puesto de la tabla, con 33 puntos, uno más que el Elche, el Numancia y el Mirandés, y los mismos que el Zaragoza, aunque el cuadro maño debe jugar el martes su partido atrasado frente al Sporting de Gijón. Los últimos empates ante el Rayo Vallecano (1-1) y el Fuenlabrada (0-0), por tanto, sirvieron al equipo para mucho más de lo esperado, pese a su decepción por haber salido de ambos choques con la sensación de que había dejado escapar la victoria.

La situación clasificatoria con la que el cuadro amarillo inicia 2020 y la segunda vuelta no es casualidad. Hay un dato revelador: la UD es el líder de las seis últimas jornadas, las mismas que encadena sin perder. La racha espectacular de cuatro triunfos y dos igualadas han vuelto a elevar a los amarillos y ya todo el mundo sueña con poder participar en la promoción de ascenso, a pesar de que el discurso oficial mantiene la permanencia como el objetivo principal.

Además, se trata del segundo equipo que más goles ha marcado en ese intervalo, con 11 tantos, cinco menos que el Almería. Un potencial ofensivo tremendo con el que Las Palmas no sólo alcanzó el éxito en forma de tres puntos, sino que también deleitó durante tramos grandes de los partidos, sobre todo los de casa y el de Elche, donde realizó su mejor partido de la temporada.

A la primera gran racha positiva del curso, en la que la UD superó de manera consecutiva al Albacete, a la Ponferradina, al Lugo y al Deportivo de La Coruña, siguieron tres derrotas ante el Cádiz, el Fuenlabrada y el Zaragoza, un empate contra el Alcorcón y una nueva caída frente al Mirandés, pero después de la cita de Anduva, los de Pepe Mel retomaron el vuelo hasta convertirse en el equipo fiable que es hoy.

Varias fueron las causas del despegue, como la recuperación de efectivos, la vuelta de la solidez defensiva o la fe en una idea de juego de toque, presión y velocidad. Pero, por encima de todas, la conjunción del talento, representado por la sociedad Viera-Pedri, con Narváez como invitado a la fiesta.

La conexión mágica

Fue precisamente con el reencuentro entre ambos genios como la UD volvió a ser la que era. El tinerfeño se había perdido cuatro citas ligueras por su participación en el Mundial sub 17 de Brasil, mientras que el grancanario había estado ausente en dos por una lesión en el abductor. Desde que volvieron a coincidir, el cuadro amarillo logró 13 puntos de 15 posibles.

Casualidad o no, cuando Viera y Pedri coincidieron en el campo, Las Palmas ganó ocho encuentros, empató uno y perdió otro, aunque en este último, en Montilivi frente al Girona, el '21' debutaba y había sido sustituido al poco de comenzar la segunda parte cuando la contienda marchaba con empate a cero.

El equipo isleño se deshizo del Real Oviedo con suma facilidad (3-1), con un recital de fútbol ofensivo y espectacular en el que Viera marcó dos goles, uno de falta, y Narváez uno. La jornada siguiente la UD viajó a Almendralejo para medirse al Extremadura, al que venció (0-1) con sufrimiento gracias a un nuevo tanto del de La Feria, esta vez de penalti.

En otra pena máxima adelantó a los suyos una semana después en la visita del Numancia. Luego, Narváez marcaría el segundo y el propio Viera el tercero para lograr la tercera victoria seguida (3-1). Hasta que llegó la remontada histórica en el Martínez Valero de Elche. Tras marcharse al descanso con dos goles de desventaja, la UD dio la vuelta al resultado (2-3) gracias a los tantos de Benito, Juan Cruz en propia puerta y Narváez. Fue la guinda, la sentencia definitiva para soñar.

El estado de gracia prosiguió dos días después con la clasificación copera en Castellón (0-2), con un once totalmente diferente -sólo repitió Curbelo-. Luego llegaron los dos últimos empates, pero para nada fue un revés. Todo lo contrario: Las Palmas hizo valer esos puntos para colocarse en la sexta plaza, y, lo que es mejor, aprobó con nota la primera cita sin el '21'. Esta UD Las Palmas es de playoff. Hay vida más allá de Viera. La fiabilidad lo es todo.

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