El restaurante clandestino “más singular de Canarias” ofrece solo servicios de cena al aire libre en un ambiente con jaimas, alfombras y cojines de estilo étnico, antorchas y mesas casi a ras de suelo, que recuerdan al de la película Memorias de África. Los clientes solo pueden acceder a esta experiencia gastronómica a través de reserva previa realizada a través de su cuenta de Instagram y para lograr una plaza hay que hacerlo con varias semanas de antelación.