España tiene que estar feliz por el resultado que ha aportado la Constitución a la convivencia y el progreso. Así lo afirmó ayer el ministro de Industria, Energía y Turismo, José Manuel Soria (PP), que ejerció el papel protagonista en la celebración del trigésimo séptimo cumpleaños de la Carta Magna en Las Palmas de Gran Canaria. El también candidato del PP al Congreso de los Diputados por la provincia oriental señaló el secesionismo catalán, el terrorismo yihadista y la consolidación de la recuperación económica como los retos que los españoles deben afrontar en el corto plazo. Varios de los invitados aludieron a la necesidad de reformar la ley de leyes, cuestión que también el ministro aceptó "siempre que exista consenso".
La celebración congregó en la Delegación del Gobierno a cerca de dos centenares de autoridades civiles y militares. Ante ellas, Soria expuso el ejemplo de la reforma constitucional del año 2011, en la que el Gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero -"con buen criterio", según el ministro- decidió incluir en el articulado de la ley de leyes española el precepto de la estabilidad presupuestaria.
Por su parte, el presidente del Cabildo de Gran Canaria, Antonio Morales (NC), presente en el acto, puso de relieve los "grandes avances" que se han logrado en el país en el periodo democrático y los "graves retroceso de los últimos años". Por ello, abogó por buscar "la equidad, la igualdad y la justicia social" en la revisión de la Constitución. Además, el mandatario insular echó en falta en el discurso de Soria la necesidad de que el nuevo articulado contemple "las especificidades de Canarias".
REF y autogobierno
Del mismo modo, Morales expuso la necesidad de exigir "mayor autogobierno" para el Archipiélago y contemplar el Régimen Económico y Fiscal (REF) como "de obligado cumplimiento". A su juicio, solo de esa manera se podrá perseguir el desarrollo de Canarias.
Al respecto, el delegado del Gobierno central en las Islas, Enrique Hernández Bento, explicó que la comunidad autónoma ya "ha dejado claro el tipo de reforma que quiere sobre la Constitución", en referencia precisamente al deseo de "anclar" en el máximo nivel de protección "todo lo que tiene que ver con el REF". Sobre ello, Hernández Bento aseguró que el Gobierno central está dispuesto a hablar y el cambio llegará en función del nivel de consenso que se alcance.
A lo largo de su discurso, el ministro Soria ordenó los problemas que deben limar los españoles aludiendo en primer lugar al "desafío secesionista" de Cataluña. Sobre este asunto destacó la resolución unánime de los once magistrados del Tribunal Constitucional contra la resolución independentista aprobada por el Parlament. "Roma locuta causa finita" (Roma ha hablado, el caso está cerrado), se adornó.
El también presidente del PP de Canarias reseñó que España "cuenta con 500 años de historia" y es "la nación más antigua de Europa". Ese bagaje de siglos "es un patrimonio que pertenece a los españoles" y, añadió: "La soberanía ni se negocia ni se toca".
Al homenaje también asistieron la presidenta del Parlamento de Canarias, Carolina Darias; el alcalde de Las Palmas de Gran Canaria, Augusto Hidalgo; el consejero de Economía, Industria, Comercio y Conocimiento del Gobierno de Canarias, Pedro Ortega, o el Defensor del Pueblo, Jerónimo Saavedra, entre otros. Junto a ellos se ubicaron políticos de todas las formaciones con amplia mayoría de los miembros del PP, caso de la portavoz en la Cámara regional, Australia Navarro, por ejemplo. También estuvo presente su homóloga en Podemos, Noemí Santana.
Todos ellos escucharon la descripción de la amenaza terrorista (yihadista) que expuso Soria, quien incidió en la necesidad de no caer en el error de pensar que este problema "es de uno u otro país" en lugar de global. Además, el ministro señaló que los ataques del Daesh (Ejército Islámico) "nada tienen que ver con la religión", sino con el deseo de acabar con el modo de vida occidental. "No les gusta que viajemos", afirmó, "ni que vayamos a conciertos", relató en clara alusión a los atentados perpetrados en Túnez y París.
El tercer reto que tienen ante sí los españoles -"siempre hemos sabido superarlos" según José Manuel Soria- es la "consolidación de la recuperación económica". El ministro destacó la existencia de "más de cuatro millones de desempleados", por lo que "con tal nivel" de paro aún no puede darse "la crisis por superada".
Si bien el ministro puso de relieve que la recesión pasada se ha reconvertido en el crecimiento económico más intenso de Europa, también reconoció que "todo es insuficiente" mientras no se consiga que el ciclo expansivo llegue a un mayor número de ciudadanos.
