La DGT dispara la retirada del carné de conducir por estas infracciones graves

Las infracciones más comunes de los conductores en España y que, por tanto, generan un mayor número de sanciones son las relacionadas con el exceso de velocidad, el consumo de alcohol y drogas, no llevar puesto el cinturón de seguridad y el uso del teléfono móvil mientras se conduce.

Así lo ha puesto de relieve la Dirección General de Tráfico (DGT), que también ha señalado que a su vez son generalizadas las sanciones por conducir con el permiso caducado, no tener la ITV al día o conducir sin el seguro obligatorio del vehículo.

Una infracción puede ser castigada con una sanción económica, pero también puede llevar consigo la pérdida de puntos en el carné de conducir.

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Clasificación de las sanciones de la DGT

Las sanciones que impone la DGT se clasifican en leves, graves y muy graves y conllevan una multa, una pérdida de puntos o ambas cosas dependiendo de la gravedad. De forma generalizada suponen las siguientes cuantías:

• Sanciones leves: multas de hasta 100 euros sin pérdidas de puntos.
• Sanciones graves: multas de 200 euros y pérdida de puntos en algunos casos.
• Sanciones muy graves: multas de 500 euros y siempre, pérdida de puntos.

No obstante, hay casos en los que las infracciones, por la gravedad de los hechos, pueden llegar a ser muy graves y equivaler a multas de 600 euros (conducir por encima de los 120 kilómetros por hora) e incluso 1.000 euros si se maneja el volante bajo los efectos el alcohol o las drogas.

Retirada del carné de conducir

La DGT podrá retirar el carné de conducir a un conductor que ha perdido todos los puntos del mismo o también porque así se determine en una sentencia judicial por homicidio imprudente y lesiones graves y menos graves, conducción temeraria, delito por exceso de velocidad, negarse a someterse a las pruebas de alcohol o drogas y abandonar el lugar del accidente tras haber provocado el mismo en una situación con víctimas, entre otros supuestos.

Las infracciones cometidas en las carreteras españolas son tanto por parte de los conductores españoles como los procedentes de países pertenecientes a la Unión Europea y también extracomunitarios.

La Eurocámara solicitó el pasado martes que la retirada del carné de conducir por haber cometido una infracción grave sea efectiva en toda la Unión Europea, es decir, que si el infractor ha sido sancionado en España o en otro país europeo, no pueda conducir en otros lugares del espacio comunitario europeo. Esta situación sería para aquellos conductores que hayan sido sancionados con la suspensión del permiso durante más de un mes en alguno de los estados miembros de la UE.

Cambios en la directiva europea de sanciones

En la IV reunión europea sobre procedimientos sancionadores en materia de tráfico celebrada en España en mayo del pasado año, se puso de relieve que muchos conductores se mueven con “sensación de impunidad” tras cruzar la frontera de su país y que, al menos, el 40% de las infracciones a no residentes españoles quedan sin efecto debido a que el infractor no es identificado o no abona la sanción. En caso de identificación del conductor, la DGT podría disparar el número de sanciones impuestas y en los casos correspondientes, la retirada del carné de conducir.

Las multas de la DGT por sanciones oscilan entre los 100 y 1.000 euros

El Consejo Europeo trabaja en reformar la Directiva 2015/413, de 11 de marzo de 2015 por la que se facilita el intercambio transfronterizo de información sobre infracciones de tráfico en materia de seguridad vial.  

La idea es modificar la directiva de permisos de conducir y la relativa al intercambio transfronterizo de información sobre infracciones de tráfico, que forman parte del Paquete de Seguridad Vial propuesto en mrazo de 2023 pr la Comisión Europea, relacionadas con la seguridad vial (CBE), como una nueva propuesta sobre los efectos en la Unión Europea de la privación del permiso de conducir.

Solamente en España, la DGT incoó en 2023 más de 250.000 expedientes sancionadores a conductores no residentes que circulaban por carreteras españolas y que habían infringido alguno de los ocho preceptos que se recogen en la Directiva Transfronteriza.