La Provincia - Diario de Las Palmas

La Provincia - Diario de Las Palmas

Contenido exclusivo para suscriptores digitales

Las mujeres cobran un 15% menos y aún mantienen el peso de la casa

Los hombres ganan 3.057 euros más al año en las Islas

Las mujeres cobran un 15% menos y aún mantienen el peso de la casa

Lourdes, Inmaculada, Isabel, Remedios, Rosa, Jesús, Elvira y Andrea acuden a la cita en el número 28 de la calle Miguel Gil de la capital grancanaria para preparar carteles y pancartas para la manifestación del 8 de marzo, Día Internacional de la Mujer, en el local de la asociación Adassa. Ese día también está convocada una huelga general parcial -con paros más allá del ámbito laboral- para denunciar la violencia machista, reclamar el fin de la brecha salarial y la feminización de la pobreza, y reivindicar, a fin de cuentas, la igualdad efectiva. Las agrupaciones feministas nutren esta convocatoria que cuenta, además, con el apoyo de organizaciones sindicales y algunos partidos. Y tienen claro lo que quieren demostrar: "Una sociedad sin mujeres no es nada". Ellas, buscando también el apoyo de ellos, quieren mostrar al mundo todo su potencial.

Las mujeres cobran en el Archipiélago un 14,33% menos que los hombres. Esto es, a ambos sexos les separa, en términos generales, 3.056,96 euros al año. Mientras que ellas ingresan 18.279,76 euros, ellos ganan 21,336,72 euros. La brecha salarial de las Islas es la más baja del país, pero no porque el sueldo de las féminas haya subido, sino porque el modelo productivo de las Islas se sustenta mayoritariamente en el sector servicios, caracterizado, según apuntan desde los sindicatos, por la contratación temporal y los bajos salarios. En el sector servicios los hombres ganan 21.179,58 euros y las mujeres 18.234,96. En el segmento industrial, la diferencia es aún mayor. En esta actividad los hombres cobran por su trabajo 24.580,21 euros y las mujeres 18.414,81. Es decir, ellas ingresan 6.162,4 euros menos al año. "Y la edad penaliza", señala la presidenta de la asociación Adassa, Lourdes Ruano, que expone que la brecha en el caso de las féminas que cuentan entre 55 y 65 años alcanza, incluso, el 34,2%. A esto se suma, además, otra realidad: "Nosotras todavía tenemos que pagar un peaje por la maternidad y los hijos".

Las cifras respaldan esta aseveración. En 2016, según el Observatorio de la Igualdad del Gobierno de España, 593 mujeres solicitaron en el Archipiélago una excedencia para dedicarse al cuidado de sus hijos frente a 100 hombres que hicieron lo propio. Lo mismo ocurre en el caso de los permisos registrados para atender a otros familiares. Ellas solicitaron en ese mismo año 85 frente a las 33 excedencias demandas por ellos.

Ante esta realidad, el movimiento feminista llega a esta fecha en plena efervescencia con un objetivo clave: romper el techo de cristal que aún se sitúa sobre las mujeres pese a los avances logrados. Un fin para el que se apela, además, a la corresponsabilidad de los hombres. "El feminismo no se entiende si no hay inclusión. Nosotras lo que decimos a es sí al feminismo, pero no al radicalismo o al hembrismo. No sé puede excluir al hombre", esgrime Ruano. Esta organización, que nació hace cuatro años para fomentar la independencia de la mujer, focaliza su actividad en los barrios del Cono Sur pese a actuar en toda la Isla. "Aún queda mucho por hacer", sostiene la presidenta de la asociación, que advierte de las actitudes machistas que, tanto en chicos como en chicas, todavía se perciben en aulas de estudiantes de entre 13 y 15 años. Por ello, Ruano, que insiste en la necesidad de combatir la brecha salarial, subraya también la importancia de trabajar contra los micromachismos desde la escuela. En el tercer trimestre del año pasado, según los datos más actualizados del Consejo General del Poder Judicial, en Las Palmas se enjuiciaron por casos de violencia sobre la mujer a tres menores y a otro más en Santa Cruz de Tenerife.

Pedro Unamunzaga, psicólogo y miembro de la Asociación de Hombres por la Igualdad de Género en Canarias (AHIGE-Canarias), expone por su parte el rol que los varones tienen en el proceso de conquista de una equiparación efectiva de oportunidades y derechos. Unamunzaga subraya que, en primer lugar, lo más importante es reconocer las injusticias que ha soportado la mujer año tras año en una sociedad patriarcal. El otro aspecto, indica, es analizar el coste que para los hombres tiene vivir "bajo un sistema deshumanizante o de masculinidad hegemónica".

¿Cuál es ese precio? Un aprendizaje de la violencia que se manifiesta, según explica, de tres maneras: violencia sobre las mujeres, sobre los hombres que no responden al modelo patriarcal, y sobre sí mismos por el daño que se autogeneran al cercenar la posibilidad de reconocer sus vulnerabilidades o su ternura. El miembro de la AHIGE-Canarias apunta a que los hombres admiten cada vez más las injusticias y dificultades a las que se han enfrentado las mujeres a lo largo de la historia. No ocurre lo mismo, esgrime, en el reconocimiento de los privilegios de los que disfruta el hombre, como la mayor facilidad para encontrar trabajo y disfrutar de mejores sueldos.

Pese a los avances logrados, Unamunzaga sostiene que en la sociedad actual existen opiniones sobre la igualdad "muy polarizadas". De un lado, indica, existe una mayor conciencia. De otro, apunta, hay una vuelta del discurso machista.

Aliento a la rebeldía

"Las mujeres que se han partido la cara por nuestros derechos merecen un reconocimiento", mantiene la antropóloga y profesora universitaria Noemí Parra. Bajo su punto de vista, aquellas mujeres que se movilizaron desde los inicios del feminismo, así como las más veteranas que aún apoyan a este movimiento desde el acompañamiento, han logrado que las jóvenes de ahora se replanteen el papel que tienen en la sociedad. "Mi vida es muy distinta a la de mi abuela", señala Parra. Pero esos pasos hacia delante, expone, pueden verse truncados. "En cualquier momento pueden darse involuciones del derecho, como en el del aborto. Hay que ser conscientes de que lo que vamos consiguiendo no es para siempre, sino que se va a ver constantemente amenazado", advierte.

La presidenta del Partido Feminista de España, Lidia Falcón, sostiene que el movimiento feminista lleva tres años "muy revitalizado" gracias a la labor de su propia formación, a la de otros organizaciones feministas, y a la indignación que provoca en la sociedad las muertes de mujeres a manos de sus compañeros sentimentales o exparejas, las violaciones y los casos de acoso sexual. En Canarias, cuatro mujeres perdieron la vida por violencia de género en 2017 y, en lo que va de año, una. A esto se une que el servicio de atención a la mujer víctima de violencia atendió en las Islas 6.415 solicitudes de emergencia, 5.263 de urgencia y otras 3.289 de información. "Las fallecidas, las supervivientes y sus hijos nos exigen que luchemos y gobernemos en favor de ellas", subraya Falcón, que anima a las mujeres y a las feministas a buscar una mayor visibilidad: "Si no tienen ambición política y no comprenden que tienen que gobernar, esto no va a cambiar".

El próximo jueves las mujeres están llamadas a parar el mundo para visibilizar su papel en la sociedad. Por un lado, los sindicatos han programado paros de dos horas entre las 11.30 y 13.30 horas, entre las 16.00 y 18.00 horas, y en las dos primeras horas del turno de noche. Por otro, la red feminista emplaza a un parón total de 24 horas. En los trabajos, en las aulas, en las casas, en las calles: "Sobran los motivos y las razones".

Compartir el artículo

stats