Las 19.100 firmas de la Ley de Volcanes estarán verificadas en el mes de julio

La toma en consideración de la iniciativa popular podría debatirse en la Cámara en el tercer aniversario de la erupción del Tajogaite

Panorámica de la erupción del volcán Tajogaite.

Panorámica de la erupción del volcán Tajogaite. / E.D.

Salvador Lachica

El proceso para la verificación de las más de 19.100 firmas que avalan la Ley de Volcanes de iniciativa popular estará concluido el próximo mes de julio, con lo que su debate de toma en consideración por el pleno del Parlamento podría celebrarse en septiembre, coincidiendo con el tercer aniversario de la erupción del volcán Tajogaite en La Palma, que sucedió el 19 de septiembre de 2021.

Así se lo ha trasladado el equipo de letrados y servicios jurídicos de la Cámara regional a los cuatro diputados que conforman la Junta de Control de la Ley (Alicia Vanoostende, Jonathan de Felipe, Raquel Díaz y Luis Campos) y al Diputado del Común, Rafael Yanes, que ejerce de presidente de la misma.

El proceso, a partir de ahora, pasa porque los servicios técnicos y jurídicos de la Cámara verifiquen que todas las firmas tienen los requisitos mínimos para ser refrendados (entre ellos, que todas sean de residentes canarios), aunque para dar el visto bueno a su tramitación parlamentaria sirve con que se den por buenas el 10% de las mismas.

 Como se recoge en el artículo 1 de la iniciativa legislativa, la misma tiene como objetivo «establecer las medidas precisas para la reconstrucción y recuperación social, económica y ambiental del espacio territorial afectado por la erupción y las coladas de lava de un volcán en el ámbito territorial afectado, y, dado su impacto sobre la sociedad y la economía insulares, de la isla en su conjunto».

Es recuperación, como rige en el artículo 2, tiene como objetivo principal que «los afectados puedan volver a instalarse en un inmueble residencial, comercial, industrial o turístico en el mismo lugar en el que se encontraban, en caso de no ser posible, en el mismo municipio en el que tenían el inmueble perdido o, en su caso, en los municipios más cercanos, o, de no ser posible, en cualquiera de los municipios de la isla, y reanudar su vida y sus actividades personales, sociales y económicas, e, igualmente, incentivar la recuperación de la isla afectada con una serie de medidas económicas, sociales y tributarias».