El base neoyorquino del Herbalife Gran Canaria, Omar Cook, comenzó a ejercitarse la semana pasada con la idea de llegar al derbi del sábado (19.30 horas) ante Iberostar Tenerife. "Tengo ganas de volver a jugar, se sufre mucho desde la grada", asegura. Lo tiene complicado, ya que de momento no ha comenzado los entrenamientos con el grupo. "Tengo que ver como evoluciona la lesión los próximos días", detalla.

Cook arrastra una lesión en el cuádricpes de la pierna izquierda que le impidió jugar los últimos tres partidos de liga, pero espera volver al parqué antes de que termine el año. "El derbi es un partido emocionante, pero todo depende de como evolucione los siguientes días", matiza el de Brooklyn, que su última actuación fue ante el Real Madrid.

"Tengo plena confianza en el equipo, han demostrado que todos están para sumar y están comprometidos, pero se sufre mucho desde fuera. Uno siempre quiere jugar y más en partidos como este", explica Cook, máximo asistente del equipo claretiano, que tiene también buenas palabras con sus compañeros de posición. "Radicevic y Fabio están jugando a buen nivel, todos están sumando para que el equipo gane".